Para conocer las sectas
Para conocer las sectas
Para conocer las sectas
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
con centenares de participantes que representaban a todas<br />
<strong>las</strong> creencias y a todos los continentes. "La base de <strong>las</strong><br />
religiones es una, explica Abdu'l Bahá, la religión debería<br />
unir los corazones".<br />
Es como una paradoja en la que la situación se retorna y<br />
en donde se descubre a los íundadores de <strong>las</strong> "<strong>sectas</strong>" y<br />
Nuevas Religiones tras la realización de un sueño de unidad<br />
de los creyentes y de reconciliación universal...» ' 2 .<br />
b) La evolución de <strong>las</strong> <strong>sectas</strong><br />
(perspectiva sociológica)<br />
Uno de los temas que más preocupa recientemente<br />
a los sociólogos y que está siendo objeto de la<br />
investigación es el de la evolución de <strong>las</strong> <strong>sectas</strong>. Si<br />
sobre el origen hay ya una serie de premisas básicas<br />
asumidas: <strong>las</strong> <strong>sectas</strong> se originan por el «cambio<br />
social», por la «pérdida de valores tradicionales y<br />
por la pérdida de credibilidad de <strong>las</strong> grandes instituciones<br />
que han cohesionado desde siempre a una<br />
sociedad determinada», y finalmente por «situaciones<br />
de inseguridad social, cultural y religiosa», el<br />
tema de la evolución del grupo sectario está menos<br />
trabajado y carece todavía de premisas básicas comúnmente<br />
aceptadas.<br />
Los trabajos de H. Richard Niebuhr 13 , Bryan<br />
Wilson ' 4 , Thomas Robbins l5 , y la obra colectiva<br />
The Future of New Religious Movements ' 6 han venido<br />
a clarificar este difícil panorama. La pregunta<br />
por el éxito (continuidad) o el fracaso (desaparición)<br />
de <strong>las</strong> <strong>sectas</strong> y NMR es primordial para el conoci-<br />
12<br />
Jean Francois Mayer, Las <strong>sectas</strong>, Desclée, Bilbao 1990,<br />
128-129.<br />
13<br />
H. Richard Niebuhr, The SocialSources of Denominationalism,<br />
Holt, Nueva York 1929.<br />
14<br />
Bryan Wilson, Magic and Millenium, Heinemann, Londres<br />
1973; Sects and Society, Greenwood, Londres 1978; es editor de<br />
The Social Impact of New Religious Movements, Edwin Mellen,<br />
Nueva York 1981. Hay traducción castellana de una de sus obras<br />
importantes: Sociología de <strong>las</strong> <strong>sectas</strong> religiosas, Guadarrama, Madrid<br />
1970.<br />
" Thomas Robbins, Cults, Converts andCharisma. The Sociology<br />
of New Religious Movements, Sage Publications, Londres<br />
1988; cap. IV: «Organisation and Transformation of Movements»,<br />
100-133.<br />
16 Varios, The Future of New Religious Movements, Bromley-<br />
Hammons, Nueva York 1987.<br />
150 PARA CONOCER LAS SECTAS<br />
miento de <strong>las</strong> mismas y sobre todo para la investigación<br />
de su «transformación» en grupos más respetables<br />
socialmente —llamados «denominaciones»<br />
en la terminología anglosajona- o en su «permanencia»<br />
como «<strong>sectas</strong>» propiamente dichas. Es obvio<br />
que nuestro interés incida en toda esta temática.<br />
¿Es posible iniciar un diálogo con <strong>las</strong> <strong>sectas</strong> y<br />
NMR? Una respuesta rápida se inclina indefectiblemente<br />
por la negativa. Pero, desde un punto de<br />
vista sociológico, <strong>las</strong> cosas son más complejas.<br />
El sociólogo H. Richard Niebuhr adelantaba hace<br />
años la hipótesis de que <strong>las</strong> «<strong>sectas</strong>» se transforman<br />
siempre en «confesiones» o «denominaciones»<br />
por un proceso natural en el que la aparición<br />
de los «hijos» de los fundadores, es decir, la segunda<br />
generación, cuestiona la radicalidad primitiva, o<br />
al menos no se siente tan comprometida en el mantenimiento<br />
de <strong>las</strong> originales convicciones con el<br />
mismo espíritu que los miembros de la primera<br />
generación. A lo sumo se sienten herederos, solamente<br />
herederos, del credo recibido.<br />
Este proceso de transformación se debe fundamentalmente<br />
al hecho de la perdida de <strong>las</strong> primeras<br />
peculiaridades que la «secta» posee por definición:<br />
aislamiento voluntario, emotividad exaltada, posturas<br />
contestatarias para con la sociedad y <strong>las</strong> Iglesias,<br />
rechazo de sacerdocios especializados, promesas<br />
de una movilidad social prometida y asegurada<br />
para «la otra vida». Cuando estos «valores» sectarios<br />
son atenuados por el paso del tiempo —no es<br />
fácil mantener la tensión frente al mundo de manera<br />
permanente, a no ser que el «retiro» sea total<br />
como en el caso de los Amish-, quiere decirse que la<br />
secta entrará en un proceso de evolución o transformación<br />
que cristaliza normalmente en la aceptación,<br />
al menos limitada, de los valores corrientes de<br />
la sociedad, y con ello se habrá convertido en una<br />
«respetable denominación».<br />
Este viraje ocurre, a veces, cuando los miembros<br />
de un grupo que han ocupado en los orígenes una<br />
escala social baja van ascendiendo a medida que<br />
otros, los recién llegados o grupos de nuevos inmigrantes,<br />
pasan a ocupar el último lugar del escalafón.<br />
Este «ascenso social» basta en algunos casos<br />
para que la primitiva hostilidad al medio ambiente<br />
disminuya y su adquirida respetabilidad signifique