08.05.2013 Views

el libro del convaleciente - AMPA Severí Torres

el libro del convaleciente - AMPA Severí Torres

el libro del convaleciente - AMPA Severí Torres

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

60 Enrique Jardi<strong>el</strong> Ponc<strong>el</strong>a<br />

Digitalización de Elsa Martínez – mayo 2006<br />

—Esto está visto —exclamó él levantándose. Y dirigiéndose al<br />

señor Molkestone agregó:<br />

—Su hijo, caballero, ha muerto a consecuencia de un accidente<br />

imprevisto.<br />

—Luego, ¿no hay que pensar en un crimen?<br />

—Yo no he dicho tanto. La intención criminal ha existido. Pero<br />

<strong>el</strong> criminal en potencia murió ayer. Vea usted; lea.<br />

Y le alargó un ejemplar de "Times", donde <strong>el</strong> señor Molkestone<br />

y yo leímos la siguiente noticia:<br />

"RIÑA EN EL TÁMESIS. — Ayer, a consecuencia de una riña, murió<br />

de un tiro de revólver, en los mu<strong>el</strong>les d<strong>el</strong> Támesis, <strong>el</strong> ciudadano indio<br />

Zahid Mahid Tahib, que debía partir mañana con rumbo a Calcuta."<br />

—Zahid era <strong>el</strong> criminal en potencia —dijo Holmes—. En cuanto<br />

al agente causal de la muerte de su hijo, mañana a estas horas se lo<br />

enviaré a usted en una caja. Vamos, Harry.<br />

EN EL CABARET<br />

Pasamos lo que restaba de la noche en un cabaret de Piccadilly.<br />

La conducta de Holmes en aqu<strong>el</strong> lugar fue por demás extraña:<br />

desde que entramos hasta que salimos permaneció todo <strong>el</strong> tiempo con<br />

los ojos clavados en la orquesta. A las doce y media de la noche<br />

murmuró:<br />

—Ya sé. Podemos acostarnos tranquilamente.<br />

Y regresamos a Baker Street a entregarnos al descanso más<br />

plombaginoso.<br />

HACIENDO EL INDIO<br />

Al día siguiente, muy de mañana, Holmes entró en mi habitación<br />

saltando por <strong>el</strong> montante, pues yo acostumbro a dormir encerrado.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!