You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
esurrección <strong>de</strong>l cuerpo, o el regreso <strong>de</strong> Cristo a esta tierra, o un día <strong>de</strong> juicio todavía<br />
futuro, no es menos la infi<strong>de</strong>lidad ahora que en los días <strong>de</strong> Francia infiel; ¿Y sin<br />
embargo quien sabe si estas cosas son como púlpitos comunes y prensas? ¿Y cual <strong>de</strong><br />
estas preguntas no están públicamente negadas (220) en nuestros púlpitos, y por los<br />
escritores y editores <strong>de</strong> los periódicos?<br />
“Seguramente, hemos caído en tiempos extraños. Esperé por supuesto que la<br />
doctrina <strong>de</strong> la pronta venida <strong>de</strong> Cristo sería opuesta por infieles, blasfemadores,<br />
borrachos, jugadores, y todo semejante; pero yo no esperé que ministros <strong>de</strong>l evangelio y<br />
profesores <strong>de</strong> religión se unirían con caracteres que acabo <strong>de</strong> <strong>de</strong>scribir, en tiendas y<br />
lugares públicos, ridiculizan la doctrina solemne <strong>de</strong> la segunda venida. Muchos que no<br />
eran profesores <strong>de</strong> religión me han afirmado estos hechos, y dicen que ellos les han<br />
visto y al presenciarlo sienten que la sangre se les enfría.”<br />
“Estos son algunos <strong>de</strong> los efectos que son producidos por predicar esta doctrina<br />
solemne y conmovedora entre nuestros fariseos <strong>de</strong> hoy. ¿Será posible que tales<br />
ministros y miembros estén obe<strong>de</strong>ciendo a Dios velando y orando por su aparición<br />
gloriosa, mientras se unen a estos mofadores en sus observaciones malvadas e impías?<br />
¿Si Cristo viniera, don<strong>de</strong> aparecerían? ¡Y qué cuenta terrible encontrarán en esa hora<br />
tremenda!”<br />
Es el lote <strong>de</strong> los siervos <strong>de</strong> Dios sufrir oposición y reproche <strong>de</strong> sus<br />
contemporáneos. Ahora, como en el tiempo <strong>de</strong> nuestro Salvador, hombres construyen<br />
los sepulcros y entonan las alabanzas <strong>de</strong> los profetas muertos, mientras que persiguen<br />
los mensajeros vivos <strong>de</strong>l Altísimo. Se <strong>de</strong>spreció a Guillermo Miller y se odió por el<br />
impío e incrédulo; pero su influencia y sus trabajos eran una bendición para el mundo.<br />
Por medio <strong>de</strong> su predicación, millares <strong>de</strong> pecadores fueros convertidos, se reformaron<br />
reinci<strong>de</strong>ntes, y se condujeron multitu<strong>de</strong>s a estudiar las Escrituras y a encontrar en ellas<br />
hermosura y gloria antes <strong>de</strong>sconocida (221.)<br />
Capítulo XIV<br />
________<br />
El Mensaje Del Primer ángel<br />
<strong>La</strong> profecía <strong>de</strong>l mensaje <strong>de</strong>l primer ángel, traída a la vista en Apocalipsis 14,<br />
halló su cumplimiento en el movimiento <strong>de</strong>l Advenimiento <strong>de</strong> 1840-1844. Ambas en<br />
Europa y en América, hombres <strong>de</strong> fe y oración fueron profundamente conmovidos<br />
cuando su atención fue llamada a las profecías. Y, escudriñado el registro inspirado,<br />
vieron la evi<strong>de</strong>ncia convincente <strong>de</strong> que el fin <strong>de</strong> todas las cosas estaba a la mano. El<br />
Espíritu <strong>de</strong> Dios exhortó sus siervos a dar la advertencia. Esparciendo por todas partes<br />
el mensaje <strong>de</strong>l evangelio eterno “diciendo a gran voz: Temed a Dios, y dadle gloria,<br />
porque la hora <strong>de</strong> su juicio ha llegado.” (Apocalipsis 14:7.)<br />
Don<strong>de</strong>quiera que los misioneros habían penetrado, fueron enviadas las noticias<br />
alegres <strong>de</strong>l regreso veloz <strong>de</strong> Cristo. En países diferentes fueron encontrados grupos<br />
aislados <strong>de</strong> cristianos, quienes, únicamente por el estudio <strong>de</strong> las Escrituras, habían<br />
llegado a la creencia <strong>de</strong> que la venida <strong>de</strong>l Salvador era próxima. En algunas partes <strong>de</strong><br />
Europa, don<strong>de</strong> las leyes estuvieron tan opresivas en cuanto a prohibir la predicación <strong>de</strong><br />
la doctrina <strong>de</strong>l advenimiento, pequeños niños fueron impelidos a <strong>de</strong>clararla, y muchos<br />
escucharon las advertencias solemnes.<br />
A Guillermo Miller y a sus colaboradores les fue encomendada la misión <strong>de</strong><br />
predicar la amonestación en los Estados Unidos <strong>de</strong> Norteamérica. Y la luz encendida<br />
por sus trabajos brilló afuera en los países distantes. El testimonio (222) <strong>de</strong> las<br />
88