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tanto al hogar como al mundo hostil; y ya en Madrid prefiere la amistad de la
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gente humilde. Andres, en cambio, es madrileno, y su residencia en Alcolea
solo Ie sirve para ver el aspecto campesino de la estupidez nacional. Su breve
idilio con Dorotea 10 conduce a la confusion, y no a un apoyo emocional
duradero. Su matrimonio con Lulu, que es de origen humilde, term ina en la
tragedia.
En cuarto lugar, Lulu en EI arbol de la ciencia y Ana en La sensualidad
pervertida se nos presentan como versiones femeninas de los protagonistas
masculinos. Lulu es una persona tan desilusionada y pesimista como Andres.
A pesar de esto, se casa con Hurtado, y se equivoca al creer que a ella tam bien
Ie corresponde ser la agente de la preservacion de la especie schopen­
haueriana. A pesar de su intelectualidad todavia Ie queda instinto, que se
reaviva con el deseo del hijo. Su muerte, y la del hijo, deja a Andres en una
"orfandad emocional" total, y este decide autoaniquilarse. En La sensualidad
pervertida, Ana se perfila como una version femenina de Murguia, con una
voluntad atrofiada. Quizas su "mentalidad moderna" no sea otra cosa que una
"sensualidad pervertida" tambien. Dice Luis:
Por 10 que pude observar despues, tenia esa mentalidad moderna,
cada vez mas frecuente en las personas nerviosas que leen muchas
obras de imaginacion y oyen mucha musica, y que van recibiendo
impresiones, sin convertirlas en actos, con 10 cual parece que la
voluntad se enmohece y se debilita. (DC 2: 961)
La opinion que el pianista Lubecki tiene de Ana es aun mas categorica; "Ie
parecia una mujer inteligente, fria, incapaz de un momento de entusiasmo y de
pasion" (DC 2: 966).
En ambas relaciones adem as de afecto 0 amor hay una amistad. Pero el