You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
Recordemos que en música, el «calderón» es <strong>un</strong> signo convencional que, puesto sobre<br />
<strong>un</strong>a determinada nota, autoriza al que la ejecuta a prolongar la duración normal ad<br />
libitum, para marcar el final de <strong>un</strong> movimiento, de <strong>un</strong>a <strong>se</strong>cción, o la suspensión en <strong>un</strong><br />
acorde. Sin calderón, <strong>un</strong>a escena corre el peligro de acabar<strong>se</strong> de manera <strong>se</strong>ca y<br />
anodina.<br />
Sin embargo, no toda escena lo necesita.<br />
Es necesario de vez en cuando para fijar el tono del film, y evitar que la sucesión de<br />
las escenas <strong>se</strong>a puramente aditiva y acumulativa. El calderón sirve, en cierto modo,<br />
para damos, alg<strong>un</strong>a que otra vez, los límites, las coordenadas de la curva dramática,<br />
haciéndonos <strong>se</strong>ntir en qué lugar de <strong>un</strong>a subida, de <strong>un</strong>a progresión, nos encontramos.<br />
Al mismo tiempo, f<strong>un</strong>ciona como p<strong>un</strong>tuación. Ahora bien, sabemos que <strong>un</strong>a diferencia<br />
de p<strong>un</strong>tación puede cambiar completamente el <strong>se</strong>ntido de <strong>un</strong>a fra<strong>se</strong>.<br />
• El «capper»<br />
De to cap (coronar), el capper es, dice Lewis Herman, <strong>un</strong> efecto de relieve, de<br />
acentuación de <strong>un</strong>a fra<strong>se</strong>, <strong>un</strong>a expresión o <strong>un</strong>a acción creadas por <strong>un</strong> ruido, <strong>un</strong>a nota<br />
musical, <strong>un</strong> gesto, <strong>un</strong> efecto simultáneo. El ejemplo aducido por Herman es el del<br />
sonido de <strong>un</strong> reloj de cuco que p<strong>un</strong>túa <strong>un</strong>a ob<strong>se</strong>rvación acida; recuerda que <strong>se</strong> debe<br />
preparar el capper para hacerle producir e<strong>se</strong> efecto.<br />
En este <strong>se</strong>ntido, el ejemplo canónico de capper es el ruido del trueno que, en los<br />
melodramas o en los films de terror, subraya las terribles revelaciones y los<br />
juramentos fatales, en escenas <strong>se</strong>nsatamente situadas durante <strong>un</strong>a tormenta.<br />
• «Buttons»<br />
Buttons (botones) <strong>se</strong>ría el nombre dado a esos momentos fuertes de suspen<strong>se</strong>,<br />
emoción, misterio, que concluyen cada «acto» de <strong>un</strong>a <strong>se</strong>rie televisiva (donde<br />
intervienen, en alg<strong>un</strong>os paí<strong>se</strong>s, las pausas publicitarias) y están destinados a mantener<br />
al espectador en vilo. Recordémos que el principio de esos calderones y botones,<br />
existía ya desde hace tiempo en toda cla<strong>se</strong> de géneros folletinescos, por entregas<br />
(cómics, folletines, foto-novelas, «<strong>se</strong>rials» del cine mudo), ahí donde había que<br />
suscitar en el lector o en el espectador el de<strong>se</strong>o de conocer lo que venía después.<br />
En la televisión, el button puede no corresponder a <strong>un</strong>a acción o a <strong>un</strong>a situación<br />
específica concreta del guión; a menudo, <strong>se</strong> crea artificialmente por la realización<br />
(primer plano de <strong>un</strong> rostro preocupado, pausa en la imagen, zoom en <strong>un</strong> detalle,<br />
redoble amenazador de la música).<br />
El caso más clásico de button es el que sirve para recordar que <strong>un</strong> grave peligro<br />
amenaza a <strong>un</strong>o de los protagonistas, o que lo muestra agredido, detenido, etc.,<br />
proponiendo <strong>un</strong> enigma, <strong>un</strong>a preg<strong>un</strong>ta, ante la cual el espectador puede esperar que<br />
en el siguiente episodio o en el «acto» siguiente <strong>se</strong> le responda.