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sabido lo duro que le resultaría a su madre su distanciamiento.<br />
¿Cómo podía hacerle esto a ella?<br />
Es una situación frecuente. <strong>El</strong> estado enfermo de la madre le<br />
da a ésta, al parecer, un poder ilimitado sobre la conciencia de su<br />
hija adulta, y lo que ella misma no pudo conseguir de su madre<br />
cuando era pequeña, la presencia y los cuidados, puede conseguirlo<br />
con facilidad chantajeando a su hija y logrando sistemáticamente<br />
que se sienta culpable.<br />
Daba la impresión de que los logros terapéuticos de Anita estaban<br />
en peligro, ya que se vio asaltada de nuevo por los viejos<br />
sentimientos de culpa. Por suerte, los síntomas de la anorexia<br />
nerviosa no resurgieron, pero las visitas a su madre hicieron que<br />
Anita se diera clara cuenta de que tendría nuevas depresiones si<br />
no decidía adoptar una postura de «dureza», para impedir el<br />
chantaje emocional, y cesaba las visitas. De modo que se fue otra<br />
vez a ver a Susan esperando encontrar ayuda y apoyo.<br />
Para su gran sorpresa, se encontró con una Susan hasta ahora<br />
desconocida para ella, que intentó explicarle que le esperaba<br />
bastante trabajo analítico si quería deshacerse definitivamente de<br />
sus sentimientos de culpa, es decir, si quería acabar con su complejo<br />
de Edipo. Los abusos incestuosos a manos de su padre<br />
habían dejado en ella sentimientos de culpa que llevaba toda la<br />
vida tratando de que fuera su madre quien los pagara.<br />
Anita no sabía qué hacer con esta explicación, no podía sentir<br />
más que el enfado por ser manipulada. Susan le parecía ahora una<br />
esclava de la escuela psicoanalítica, cuyos dogmas, a pesar de sus<br />
múltiples aseveraciones, era evidente que no había cuestionado<br />
suficientemente. Susan le había servido de gran ayuda para liberarse<br />
del modelo de la pedagogía venenosa, pero ahora mostraba<br />
una dependencia hacia los criterios de su formación que a Anita le<br />
resultaban totalmente falsos. Era casi treinta años menor que