Decargar libro - Manuel Requena
Decargar libro - Manuel Requena
Decargar libro - Manuel Requena
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
" 32"<br />
A LA ROCA QUE NOS SALVA<br />
Preciosa la imagen de la roca que salva, porque se conecta con toda la vivencia de<br />
fe experimental de los hebreos, y de todos los mediterráneos, tan acostumbrados a<br />
la experiencia de sentidos en la luz, en el tacto, en el gusto.... . Lo que nos salva no<br />
es un concepto, es una roca. Es la Palabra de la Verdad, que en la experiencia de la<br />
fe, es como una roca de firme y de segura.<br />
Es un sitio donde puedo apoyar mis pies y sentirme a salvo del temporal marino<br />
de los pueblos, de las gentes, y genes de la carne, de todo lo que estorba para llegar<br />
a la experiencia, en el grado posible desde aquí, del Dios vivo. O al menos, el salmo<br />
se refiere a que El llegue a mí, a mi mundo de sentidos, de visiones y tactos, con los<br />
signos que la comunidad le ha preparado, instruida por el Espíritu, en la liturgia<br />
viva de la Iglesia.<br />
Conocer la salvación como una ‘ROCA’, es otra forma poético-profética de decir lo<br />
que parece el mensaje central del salmo: lo único que importa en la alabanza, es<br />
entrar a la presencia de Dios, a la experiencia salvífica de Dios, que<br />
inmediatamente se derrama en alabanza, en acción de gracias, como dirá<br />
enseguida.<br />
En realidad, el concepto de ‘roca que salva’, es una clara profecía del Mesías. Desde<br />
esta distancia del tiempo, y con nuestra perspectiva de la historia, resulta fácil<br />
saber de quien estaba hablando el salmista. Mas fácil incluso que para él mismo,<br />
porque nosotros tenemos ya resueltos todos los problemas de identificación, a<br />
poco que conozcamos la obra del Cristo Jesús de Nazaret. Para un hombre de hace<br />
tres mil años, la cosa era distinta.<br />
De todas formas, como Dios es siempre el mismo, también para el salmista, el<br />
Señor es la 'Roca que nos salva', auque no es un islote quieto y solitario, sino un<br />
camino que se dirige hacia el Padre. Es el movimiento interior hacia el Padre, lo<br />
que en el lenguaje de la vida interior, se convierte en la ROCA QUE NOS SALVA.<br />
Es un ejemplo de la unión de los contrarios que se aplica a Cristo en toda la<br />
escritura. Aquí es Roca, aunque sea camino.<br />
Obviamente la roca que nos salva a nosotros, es Jesús de Nazaret resucitado. La<br />
Roca que nos salva, a la que hay que dar vítores, es Cristo, y aquí se refiere<br />
específicamente a su experiencia en la oración cristiana de la Iglesia. Subirse a la<br />
Roca que nos salva, o darle vítores, es ser capaz de entrar al mundo de la fe que<br />
nos ofrecerá enseguida en el versículo siguiente y concretamente en la liturgia de<br />
alabanza de la Iglesia.<br />
ENTREMOS A SU PRESENCIA DANDOLE GRACIAS ACLAMANDALO CON<br />
CANTOS.<br />
Es la invitación más importante del salmo: entrar a su presencia.