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h i s to r i a f í s i c a y p o l í t i c a d e c h i l e
Concha muy larga, fusiforme, de espira larga, regularmente cónica, compuesta
de rosca saliente, convexa, angulosa, carenada en el medio y adornadas de estrías
transversas, finas y regulares; la última rosca muy grande y más finamente estriada;
el canal está bastante prolongado, la escotadura del borde derecho es más ancha.
Dimensiones: largo, 5 líneas y ¼; ancho, un poco más de 2 líneas.
Según M. D’Orbigny, que la ha dado a conocer, esta especie tiene relación con la
Pl. pyrulata, que se halla fósil en los terrenos terciarios del valle de París, ,pero se
distingue de ella por una forma alargada y por sus roscas de espira más carenadas y
más fuertemente angulosas. Habita fósil en las gredas terciarias de la isla Quiriquina,
en la bahía de Concepción.
iv. Pi r u l a - Py r u l a
Testa subpyriformis, ventricosa, basi canaliculata, canale brevi, submarginato, spira brevisima,
apertura lata, columella patula, levis, labrum dextrum integrum, operculum corneum
unguiculatum; apice terminali.
Py r u l a Lamarck, etcétera.
Concha subpiriforme, canaliculada en su base, ventruda en su parte superior,
sin rodete en lo exterior; espira rebajada; columela lisa, aplastada; borde derecho
sin escotadura. Opérculo córneo, oval, unguiculado, de lamela concéntrica, de
vértice terminal. El animal tiene el hocico largo, provisto de una trompa ancha; los
tentáculos son pequeños, cilíndricos y oculados en su base externa; el pie es subcuadrilatero,
surcado en su parte anterior y provisto posteriormente de un opérculo
córneo bastante grande. La cavidad branquial encierra dos peines branquiales,
desiguales, siendo el del lado izquierdo el más largo. El manto está prolongado es
un sifón grueso y corto sirviendo a conducir el agua a esta cavidad branquial; está
alojado en el canal de la concha que lo sobrepasa un poco.
El órgano macho es largo, un poco curvo y encorvado en su extremo y hace salida
junto al cuello. Tal cual lo ha establecido Lamarck, este género está destinado a
admitir grandes reformas, si tal vez no hay que suprimirlo; encierra en efecto un
cierto número de especies pertenecientes a diferentes géneros; así es que se hallan
en el que deben ser devueltas ya a los husos ya a las púrpuras y en fin un grupo
entero, teniendo por tipo la Pyrula ficus, el cual debe ciertamente formar un género
particular. Así purificado, el género pyrula no contendría más que las especies que
tienen por tipo la Pyrula melongena, las cuales se distinguen por su forma muy ancha,
por su canal sumamente corto, por su espira muy rebajada y la abertura ancha y
patulada. Estas especies provienen sobre todo de los mares de América; en todo
caso, Chile no ofrece ninguna en estado viviente y si al contrario dos en estado
fósil. En fin, tendremos que mencionar otras dos pertenecientes a un grupo de
pyrulas de canal muy alargado; son estas la Pyrula spirillus, proveniente del estrecho
de Magallanes y la Pyrula longirostra hallada fósil en Concepción.
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