08.05.2013 Views

Benito Perez Galdos - Fortunata y Jacinta - v1.0

Benito Perez Galdos - Fortunata y Jacinta - v1.0

Benito Perez Galdos - Fortunata y Jacinta - v1.0

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

Mauricia creía que estaba ya bastante iluminada,<br />

porque la excitación encendía sus<br />

ideas dándole un cierto entusiasmo; y después<br />

de hacer un poco de ejercicio corporal<br />

colgándose de la reja, porque sus miembros<br />

apetecían estirarse, se puso a rezar con toda<br />

la devoción de que era capaz, luchando con<br />

las varias distracciones que llevaban su mente<br />

de un lado para otro, y por fin se quedó<br />

dormida sobre el duro lecho de tablas. Sacáronla<br />

del encierro al día siguiente temprano,<br />

y al punto se puso a trabajar en la cocina,<br />

sumisa, callada y desplegando maravillosas<br />

actividades. Después de cumplir una condena,<br />

lo que ocurría infaliblemente una vez<br />

cada treinta o cuarenta días, la mujer napoleónica<br />

estaba cohibida y como avergonzada<br />

entre sus compañeras, poniendo toda su<br />

atención en las obligaciones, demostrando<br />

un celo y obediencia que encantaban a las<br />

madres. Durante cuatro o cinco días desempeñaba<br />

sin embarazo ni fatiga la tarea de<br />

tres mujeres. Pasadas dos semanas, advertí-

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!