15.05.2013 Views

Rosa Luxemburgo – Obras escogidas

Rosa Luxemburgo – Obras escogidas

Rosa Luxemburgo – Obras escogidas

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

que se extiende como un incendio forestal. Pero cuanto mayores sean las masas y el<br />

número de naciones arrastradas a la guerra mundial, mayor será su duración.<br />

Todos estos factores demuestran, antes de que se llegue a la victoria o derrota, cuál<br />

será el resultado de la guerra: la ruina económica de todas las naciones participantes y, en<br />

medida creciente, de las naciones formalmente neutrales, fenómenos no observados en las<br />

guerras anteriores de la era moderna. Cada mes de guerra que transcurre confirma y<br />

fortalece este efecto y quita así, por adelantado, los frutos que se espera dará la victoria<br />

militar. Esto no lo podrá alterar, en última instancia, ni la victoria ni la derrota; por el<br />

contrario, probablemente la solución no será de tipo militar y aumenta la probabilidad de<br />

que la guerra termine en virtud del cansancio general total. Pero aun una Alemania<br />

victoriosa, en esas circunstancias, aunque los agitadores belicistas imperialistas lograran<br />

llevar el asesinato en masa hasta la destrucción total de sus adversarios, aunque se<br />

cumplieran sus sueños más osados, lograría a lo sumo una victoria a lo Pirro. Sus trofeos<br />

serían una serie de territorios anexados, empobrecidos y despoblados, y la ruina bajo su<br />

propio techo.<br />

El observador más superficial no puede dejar de observar que la nación más victoriosa<br />

no puede contar con reparaciones de guerra que compensen las heridas. Tal vez vean en la<br />

mayor ruina económica de Inglaterra y Francia, los países más cercanos a Alemania en<br />

virtud de sus vínculos comerciales, de cuya recuperación depende su propia prosperidad,<br />

un sustituto y un agregado a su victoria. Tales son las circunstancias bajo las que el pueblo<br />

alemán se vería obligado, aun después de una guerra victoriosa, a pagar al contado los<br />

empréstitos de guerra “votados” por el parlamento patriota; es decir, tomar sobre sus<br />

hombros la carga inconmesurable de los impuestos y una dictadura militar fortalecida<br />

como único fruto tangible y permanente de la victoria.<br />

Si tratáramos ahora de imaginar las peores consecuencias de la derrota,<br />

encontraríamos que, con la única excepción de las anexiones imperialistas, serían en todo<br />

idénticas a las consecuencias inevitables de la victoria que pintamos más arriba: las<br />

consecuencias de la guerra actual poseen una envergadura tal y están tan profundamente<br />

arraigadas, que el resultado militar poco puede alterar las consecuencias definitivas.<br />

Pero supongamos por un momento que la nación victoriosa se encontrara en una<br />

situación tal que fuera capaz de evitar la gran catástrofe para su propio pueblo, que pudiera<br />

arrojar todo el peso de la guerra sobre los hombros del enemigo vencido, pudiera<br />

estrangular el desarrollo industrial de éste mediante toda clase de impedimentos. ¿Puede el<br />

movimiento obrero alemán abrigar esperanzas de desarrollarse mientras la actividad de los<br />

- 333 -

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!