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De la Economía Ambiental a la Economía Ecológica - Fuhem

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<strong>De</strong> <strong>la</strong> Economía <strong>Ambiental</strong> a <strong>la</strong> Economía Ecológicaderivan una serie de supuestos para los neoclásicos, algunos de los cuales se discutirán másade<strong>la</strong>nte. Tres supuestos básicos son: que existen funciones de utilidad; que existe unafunción de utilidad que permite ordenar los bienes que no pasan por el mercado; y que estasvaloraciones pueden ser empíricamente identificadas mediante el método de <strong>la</strong> VC y del CV.La valoración contingente se define como «cualquier enfoque para <strong>la</strong> valoración deun bien que se basa en <strong>la</strong>s respuestas individuales ante circunstancias hipotéticas p<strong>la</strong>nteadasen un mercado estructurado artificialmente» (Seller, Stoll y Chavas 1985, p. 158).Típicamente, este método de valoración se usa en situaciones en <strong>la</strong>s que el valor de cambiono se puede establecer mediante un procedimiento de mercado, por lo que no hay ningúnprecio asociado a estos bienes. La VC sigue el enfoque de utilizar un cuestionario directopara solicitar respuestas individuales que pretendan reflejar <strong>la</strong> valoración que cada individuohace de un bien que no pasa por el mercado. El cuestionario intenta simu<strong>la</strong>r un mercadohipotético para el bien en cuestión, donde el que responde indica o bien su disposición apagar (DP) o bien su disposición a recibir (DR) <strong>la</strong> compensación por el bien en cuestión(Bishop y Heberlein 1979, p. 926).Hay tres cuestiones fundamentales en torno a esta técnica que p<strong>la</strong>ntean problemaspotenciales. La primera es el uso de una función de utilidad para calcu<strong>la</strong>r el valor. Lasegunda cuestión es <strong>la</strong> naturaleza hipotética de solicitar ordenaciones según el valor. Latercera cuestión es <strong>la</strong> de validar los datos resultantes. La cuestión de <strong>la</strong> validación consisteen determinar si el cuestionario mide lo que pretende medir. Richard Bishop y ThomasHeberlein revisaron los resultados empíricos preliminares de su estudio sobre los permisosde caza de gansos y sugirieron: «cuando se suman en conjunto, estos problemas potencialesson suficientes para justificar un escepticismo considerable sobre <strong>la</strong> precisión en el cálculode los valores obtenidos» (Bishop y Heberlein 1979, p. 926). Christine Seller, John R. Stolly Jean-Paul Chavas también reflejan estos sentimientos en su estudio sobre canoas de recreo,llegando a <strong>la</strong> conclusión de que <strong>la</strong> VC tenía problemas al obtener como resultados curvas dedemanda no-negativas y excedentes del consumidor negativos (Seller, Stoll y Chavas 1985,pp. 172 y 75). En otras pa<strong>la</strong>bras, <strong>la</strong>s respuestas obtenidas mediante <strong>la</strong> valoracióncontingente, mediante un cuestionario de formato abierto, mostraban que los encuestadosestaban dispuestos a pagar menos de lo que realmente gastaban durante sus vacaciones.Por su parte, el método del CV intenta calcu<strong>la</strong>r <strong>la</strong>s funciones de demanda para bienesque no pasan por el mercado mediante <strong>la</strong> noción de costes indirectos. El método se ha usadoampliamente en <strong>la</strong> valoración de áreas recreativas (Seller, Stoll y Chavas 1985, p. 157). Lasfunciones de demanda se calcu<strong>la</strong>n usando los costes de viaje como un sustituto del valor. Aldefinir los costes indirectos, se establecen varios supuestos importantes. En primer lugar, sedebe determinar qué son lugares o actividades sustituibles. En segundo lugar, se tiene quetomar una decisión sobre el valor que se va a conceder al tiempo necesario para viajar allugar. En tercer lugar, se tienen que tomar decisiones sobre cómo repartir el valor de unlugar entre el entorno y <strong>la</strong>s demás actividades. También existe una serie de problemas sobrelos requisitos de los datos re<strong>la</strong>cionados con este enfoque. Los editores del texto ValuingEnvironmental Goods llegan a <strong>la</strong> conclusión de que los problemas de especificación y derecogida de datos con este método «dan como resultado el desvanecimiento de lo que unavez se consideró como <strong>la</strong> mayor fuerza potencial del CV: el atractivo de <strong>la</strong> noción de que elvalor de <strong>la</strong> visita debe igua<strong>la</strong>r o superar los costes de viaje» (Cummings, Brookshire ySchulze 1986, p. 95). Parece que los resultados del CV son función de los supuestosrealizados.Los modelos de medición están diseñados para reflejar una construcción teórica, porlo que antes de que se puedan entender técnicas de medición como <strong>la</strong> VC o el CV, se debe123

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