Coinfección TB/VIH: GuÃa ClÃnica. Versión actualizada â 2010
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El efecto de la BCG sobre la reacción tuberculínica no se prolonga<br />
más allá de 3 años, y la positivización de la reacción de la PPD por<br />
BCG no suele exceder de los 10 mm. Por lo tanto, en los niños que<br />
han recibido BCG en los últimos 3 años y tienen una PPD ≤ 10 mm<br />
podría considerarse efecto posvacunal; en niños con BCG y PPD ≥<br />
15 mm siempre se considera positiva; y en niños con BCG y prueba<br />
de tuberculina entre 11–14 mm habrá que individualizar. Toda PPD<br />
≥ 15 mm casi siempre se considera positiva. En situación de riesgo<br />
de desarrollar enfermedad tuberculosa, debe obviarse el antecedente<br />
de BCG.<br />
8.4.1.2 Baciloscopia y cultivo<br />
La baciloscopia y cultivo determinan el diagnóstico de <strong>TB</strong>, no obstante<br />
la rentabilidad de la prueba es baja en adultos con <strong>VIH</strong> (31 a<br />
81 %) y puede ser aún más baja en niños. A pesar de esta baja rentabilidad<br />
está altamente recomendada pues permite la realización de<br />
pruebas de sensibilidad de la cepa, aspecto especialmente relevante<br />
en un contexto de alta tasa de resistencia a los medicamentos antituberculosos<br />
de primera línea.<br />
En niños mayores y adolescentes se puede obtener la muestra por<br />
esputo, inducido o no, y en los más pequeños la muestra que más<br />
frecuentemente se obtiene es el aspirado gástrico. Habitualmente se<br />
recogen aspirados gástricos en 3 días consecutivos a primera hora de<br />
la mañana, en ayuno.<br />
8.4.1.3 Radiografía de tórax<br />
En la imagen típica de la tuberculosis pulmonar, los campos pulmonares<br />
superiores suelen estar afectados y la cavitación pulmonar<br />
es muy sugestiva del diagnóstico. Sin embargo, a medida que disminuye<br />
la inmunidad, los patrones radiográficos atípicos son más<br />
frecuentes, desapareciendo la preferencia por los campos superiores.<br />
CAPÍTULO VIII • Tuberculosis y <strong>VIH</strong> en la niñez 117