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LAS DOS VIDAS DEL HÉROE

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afueras de Sibi el ferrocarril provisional llegaba a un abrupto final al pie de las montañas. Ni<br />

estación ni nada por el estilo; simplemente nos bajamos del tren, ensillamos nuestros caballos y<br />

cabalgamos hasta acampar un poco más lejos de donde nos fueron suministrados los ponies. La<br />

siguiente mañana el grupo cabalgó en dirección norte. Les tomo una marcha de ocho días a<br />

través de gargantas montañosas y sobre un desierto arenoso, para llegar a Quetta.- Aquí supo<br />

Baden-Powell que su regimiento había partido tres días antes. Recogió a una docena de<br />

rezagados y continuó con su pequeño comando hacia Kandahar. con la peor parte del viaje por<br />

delante.<br />

Después de Quetta los hombres tenían que pasar por las alturas de Kojak, entre el<br />

Beluchistán Británico y Afganistán, con los revólveres listos. Bandas merodeadoras de Ghazis<br />

habían sido descubiertos en las montañas, y afganos amigos habían resultado emboscados y<br />

heridos en lucha con los fanáticos, y existían informes de que el regimiento había encontrado en<br />

su marcha a tres hombres con las manos atadas y degollados.<br />

Baden-Powell y su grupo llegaron a Kandahar el 17 de diciembre. Era un extraño lugar de<br />

ver, pero no tan grande como habían esperado. Era una ciudad de casas con techos planos y<br />

estrechos pasadizos, circundaba por altas paredes con torreones grises Los sacos de arena<br />

todavía estaban en las murallas y por donde quiera se veían señales de la batalla. Toda la<br />

ciudadela estaba llena de las marcas de los disparos recibidos durante el sitio de Ayub. Había<br />

una tosca horca fuera de la puerta principal, donde colgaban a los afganos cada cierto tiempo.-<br />

Baden-Powell había sido afortunado durante sus años de formación escolar, al tener como<br />

director a William Haig Brown.- Tuvo igualmente suerte al tener, durante sus años de formación<br />

como oficial, a un superior como el Coronel Baker Creed Russell, que había sustituido al<br />

viejo Miller durante la ausencia de B-P en Inglaterra.<br />

Baker Russell se había hecho de un nombre como luchador antes de tomar el comando de<br />

13° de Húsares, poco después apodado La Docena de Baker.- Había luchado en el Motín<br />

Hindú en 1857, y servido bajo Garnet Wolseley en la guerra Ashanti de 1873-74 y en la del Sur<br />

Africa en 1879.- De acuerdo con B-P, era de un carácter sin dobleces. Tenía buen tipo de<br />

hombre y de soldado, más de 6 pies (1.80 mts) de estatura, con una penetrante mirada de halcón,<br />

bigote grande y negro y voz estentórea, como un toro. Era la clase de hombre con quien había<br />

que pensarlo dos veces antes de bromear, ¡y se estaría en lo cierto!.<br />

Pero el rasgo de carácter de su Coronel que tenía mayor atractivo para Baden-Powell, era<br />

que Baker Russell no era un Coronel ortodoxo. De ninguna manera se guiaba por el manual<br />

de instrucciones y sabía poco y le importaba menos las palabras de estilo prescritas.- Pero tenía<br />

mirada de soldado para la región, el terreno y el lugar donde sus hombres deberían entrar en<br />

batalla, y los dirigía bajo sus propias indicaciones, más que por dispositivos formales indicados<br />

en el manual.<br />

Baker Russell tenía una misteriosa habilidad para sacar a relucir la inteligencia, iniciativa y<br />

autoconfianza de sus hombres. Muy pronto decidió que B-P colmaba su idea de lo que un joven<br />

oficial británico debería ser, y le dio todas las oportunidades posibles para usar y desarrollar sus<br />

cualidades.-<br />

La primera ocasión importante para Baden- Powell de probar sus habilidades en una de sus<br />

especialidades, bajo su nuevo Coronel, se presentó en menos de dos semanas después de su<br />

llegada a Afganistán. Un escuadrón de reconocimiento tenía que ser enviado al campo de la<br />

batalla de Maiwand, para preparar informes y mapas que serian utilizados por la Corte Marcial<br />

formada para determinar las responsabilidades de la debacle. B-P le recordó a Baker Russell las<br />

estrellas que había recibido en topografía, lo que hizo que fuera aprobada su solicitud de ser<br />

enviado junto con el escuadrón.-<br />

Por lo que concernía a B- P, el rastreo, con el General Wilkinson, el Coronel Oliver St John<br />

y varios otros engreídos, se convirtió en tres días de caminata muy emocionante. El escuadrón<br />

cubrió cada metro cuadrado del campo de batalla, abandonado por los derrotados soldados<br />

británicos cinco meses antes: Señales de una buena cantidad de caballos muertos, hileras de<br />

cajas de municiones, huellas de ruedas y cascos, hombres muertos por montones<br />

muchos habían sido enterrados de prisa y vueltos a desenterrar por los chacales ropas y<br />

pertrechos por todo el lugar.<br />

El Teniente Baden-Powell tenían sus propias ideas sobre la debacle. En una carta a George<br />

atribuyó la principal culpa a la pobre fusilería de los soldados británicos: habían estado<br />

disparando con la miras demasiado altas. El enemigo estaba a 300 yardas (270 metros) de<br />

ellos, y encontramos balas disparadas a dos millas (3.200 metros) balas Martini-Henry. El<br />

resto de la culpa tenía que corresponderle muy obviamente al General al mando: Creo que<br />

debería ser fusilado más o menos, tú sabes bien que más, mas que menos.-<br />

B-P preparó nueve mapas diferentes mostrando las posiciones de varios escuadrones en la<br />

batalla, reveladas por las huellas que dejaron. Un juego de sus mapas fue utilizado por la Corte<br />

Marcial, otro enviado al Comandante en Jefe de las Fuerzas Británicas en la India, Sir Frederick<br />

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