Lectura tercera. Individuo y persona - Fundación Gustavo Bueno
Lectura tercera. Individuo y persona - Fundación Gustavo Bueno
Lectura tercera. Individuo y persona - Fundación Gustavo Bueno
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
<strong>Lectura</strong> 3. <strong>Individuo</strong> y <strong>persona</strong>. V 157<br />
de concepciones de la <strong>persona</strong> que, en principio, cabría tomar en cuenta en un sistema<br />
polémico mantenido en el terreno filosófico del presente. Con esto estamos<br />
diciendo que no podemos considerar, como si tuvieran lugar en un mismo plano<br />
filosófico, los debates en tomo a la idea de <strong>persona</strong> con los cristianos traducianistas<br />
y los debates con Kant o Hoyle. Esto no significa que podamos desentendemos<br />
de las ideas de <strong>persona</strong> prefilosóficas o extrafilosóficas; ellas constituyen<br />
el fondo paleontológico o mitológico de las ideas filosóficas y, por tanto, habrán<br />
de ser tenidas en cuenta desde una perspectiva dialéctico genética.<br />
El sistema de las seis Ideas de Persona con significado filosófico en el presente<br />
contiene, en todo caso, ideas de <strong>persona</strong> que pueden ser adscritas a las dos<br />
opciones de cada uno de los criterios disyuntivos utilizados, exceptuando las opciones<br />
(a), las ahistóricas, del tercer criterio. Tanto la opción I (ideas 6 y 8) como<br />
la opción II (ideas 10,14, 12,16); tanto la opción A (ideas 6, 10,14) como la opción<br />
B (ideas 8, 12,16); por último tanto la opción (p) (ideas 10,12) como la opción<br />
(q) (ideas 6, 8, 14, 16).<br />
Daremos algunos rasgos esenciales orientados a dibujar esquemáticamente<br />
cada una de las seis ideas de <strong>persona</strong> de referencia.<br />
10. La idea cósmica de <strong>persona</strong>.<br />
La ¡dea (6) de Persona podría ser considerada como una idea cósmica, en<br />
tanto ella supone un mundo material ordenado y jerarquizado (un «Cosmos») que<br />
comprende los Cielos y la Tierra, o que está concebido, en gran medida, como la<br />
«casa de las <strong>persona</strong>s», no sólo humanas, sino también infrahumanas o superhumanas,<br />
demoníacas (en el sentido helénico de este concepto, que incluye su corporeidad).<br />
Es una idea dibujada inicialmente, por tanto, en el contexto angular y<br />
anantrópico, lo que no excluye un tratamiento histórico-evolutivo. Esta idea de<br />
<strong>persona</strong> podría además considerarse como una idea moderna, si entendemos lo<br />
«moderno» en el sentido de lo que está ligado a la revolución científica e industrial,<br />
o, dicho de otro modo, a la Astronomía de Newton. Más aún: esta idea «cósmica»<br />
de <strong>persona</strong> es, probablemente, la idea más «activa» en nuestro presente, si<br />
nos atenemos a su constante intervención en la literatura, en la televisión y en la<br />
prensa cotidiana. Queda atrás la metafísica de las inteligencias separadas, la metafísica<br />
de los espíritus puros (=incorpóreos) motores a distancia de los «astros»<br />
teledirigidos (de los que habla, por ejemplo, el Comentario al «De Suhstantia Orhis»<br />
de Averroes, por Alvaro de Toledo); pero no por ello el «cielo estrellado» seguirá<br />
siendo el cielo cartesiano, limpio de cualquier residuo de res cogitans (el<br />
cielo vacío que aterrorizaba a Pascal). Por el contrario, en la época modema, los<br />
cielos se volverán a poblar de sujetos <strong>persona</strong>les, no ya metafísicos, sino corpóreos,<br />
aunque eventualmente más inteligentes incluso que las <strong>persona</strong>s humanas.<br />
Este es el «escenario» ordinario correlativo al «imaginario universal» de nuestro<br />
siglo (aunque no estaría de más constatar el mutismo que ante este asunto mantiene<br />
la filosofía de los profesores). En este escenario, en los años sesenta, se con-<br />
<strong>Gustavo</strong> <strong>Bueno</strong>, El sentido de la vida, Pentalfa, Oviedo 1996