GUIAS HIPERTENSION ARTERIAL.indb - Scc
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GUÍAS COLOMBIANAS PARA EL DIAGNÓSTICO<br />
Y TRATAMIENTO DE LA HIPERTENSIÓN <strong>ARTERIAL</strong><br />
mantener las cifras de presión arterial por debajo de 140<br />
mm Hg. Dada la polifarmacia que se utiliza hoy en día,<br />
es más preocupante no disminuir en forma exagerada<br />
las cifras de presión arterial.<br />
Recientemente se ha cuestionado el uso del atenolol<br />
en pacientes con hipertensión (18). En una publicación<br />
que revisa 17 ensayos clínicos de los cuales se reclutan<br />
nueve publicaciones que reúnen los criterios para el<br />
meta-análisis, se encuentra que en una población de<br />
6.825 pacientes tratados con atenolol versus placebo,<br />
seguidos durante 4,6 años, no hay diferencias esta-dísticamente<br />
significativas en cifras de mortalidad e infarto<br />
y es limítrofe con la significancia en la disminución de<br />
evento cerebral vascular (0,85, IC 0,72-1,01), a pesar<br />
de la disminución adecuada de las cifras de presión<br />
arterial reportada como 18/11 en el estudio SHEP (19).<br />
El exceso de riesgo de mortalidad de 1,13 (IC del 95%<br />
de 1,02-1,25) en los pacientes que tomaron atenolol,<br />
es intrigante aunque los resultados pueden explicarse<br />
por las particularidades de la molécula, que incluyen<br />
un bajo coeficiente de solubilidad en lípidos, pobres<br />
propiedades para el manejo de arritmias, o porque no<br />
tiene efecto sobre la regresión de la hipertrofia ventricular.<br />
Este análisis sólo debe despertar una voz de alarma<br />
en los pacientes que utilizan este medicamento como<br />
monoterapia.<br />
En conclusión, los estudios SAVE y AIRE (20, 21),<br />
muestran que la reducción del riesgo de muerte en los<br />
pacientes post-infarto que toman beta-bloqueadores,<br />
es adicional a los efectos benéficos de los inhibidores<br />
de la enzima convertidora de la angiotensina, sentando<br />
una base firme para proponer el empleo de ambos<br />
regímenes de medicamentos en los pacientes. El beneficio<br />
de los beta-bloqueadores se mantiene en la era de<br />
la fibrinólisis y el ácido acetil salicílico. Este efecto es<br />
tan importante como el efecto de otras terapias como<br />
hipolipemiantes: el número de pacientes necesarios de<br />
tratar durante dos años para evitar una muerte, es de<br />
24 para los fibrinolíticos y el ácido acetil salicílico, 42<br />
para los beta-bloqueadores, 94 para las estatinas y 153<br />
para los antiplaquetarios.<br />
El aspecto en el cual no hay claridad es sobre cuánto<br />
tiempo se deben utilizar los beta-bloqueadores. Durante<br />
el primer año, la mortalidad se disminuye en 39% con<br />
propranolol, como se demostró en el BHAT (22), donde<br />
se dio a pacientes sobrevivientes de infarto del miocardio<br />
a dosis de 180 a 240 mg día; la protección en los<br />
sobrevivientes del infarto continúa por varios años.<br />
Revista Colombiana de Cardiología<br />
Febrero 2007<br />
Inhibidores de la enzima convertidora<br />
de la angiotensina<br />
Los inhibidores de la enzima convertidora de angiotensina,<br />
son un grupo de medicamentos que ejercen su<br />
efecto antihipertensivo gracias a la inhibición de la enzima<br />
que convierte a la angiotensina I en angiotensina II.<br />
Adicionalmente, puede aumentar la concentración local<br />
de bradiquininas. Su uso se asocia con una disminución<br />
en la actividad NADPH vascular y la generación de oxígeno<br />
reactivo. Disminuyen la activación de varias vías<br />
que influyen sobre la inflamación vascular, disfunción<br />
endotelial y progresión de la aterosclerosis. Las acciones<br />
sobre el endotelio, que incluyen protección sobre<br />
el proceso anti aterosclerótico, mejoría de la función<br />
endotelial, modulación de la vasoconstricción endotelial<br />
inducida de forma neurohumoral y aumento de fibrinólisis<br />
disminuyen la activación de metalopro-teinasas<br />
y mejoran la estabilidad de la placa ateros-clerótica.<br />
También disminuyen la hipertrofia del ventrículo izquierdo<br />
en forma directa y, por supuesto, por la misma acción<br />
antihipertensiva.<br />
Se considera que son medicamentos de primera línea<br />
en el tratamiento de la falla cardíaca; su efecto es parti-cularmente<br />
notable si está comprometida la función<br />
sistólica del ventrículo izquierdo. Los ensayos clínicos<br />
muestran su efectividad para disminuir la mortalidad y<br />
morbilidad por eventos cardiovasculares nuevos como<br />
reinfarto y hospitalizaciones por episodios de falla cardíaca.<br />
Estos efectos benéficos también se comprueban en<br />
los pacientes con antecedentes de infarto de miocardio<br />
con o sin disfunción ventricular; igualmente en diabéticos<br />
con perfil de alto riesgo, con disfunción renal (23).<br />
En los pacientes con enfermedad coronaria se han<br />
empleado desde hace más de una década. Los resultados<br />
de los estudios multicéntricos favorecen a este tipo de<br />
intervención. Para efectos de análisis de la evidencia se<br />
pueden considerar nuevamente tres tipos de intervenciones<br />
estudiadas con ensayos clínicos:<br />
• Intervenciones tempranas en la fase aguda de<br />
un infarto del miocardio.<br />
• Experimentos en pacientes con historia de infarto<br />
reciente.<br />
• Ensayos de prevención secundaria en pacientes<br />
con perfiles de riesgo desfavorable que incluyen historia<br />
de enfermedad coronaria documentada.