El mundo religioso de los Luya y Chillaos - Grupo EspeleoKandil
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La pelea <strong>de</strong> gatos en <strong>los</strong> tejados, anuncia posibles riñas familiares<br />
“…mira acá hay la creencia <strong>de</strong> que cuando en las noches pelean<br />
<strong>los</strong> mishos (gatos) en <strong>los</strong> techos o altil<strong>los</strong> <strong>de</strong> las casas, es porque<br />
se van a pelear entre personas <strong>de</strong> una familia, dicen las personas<br />
que mientras sea mas intensa la pelea <strong>de</strong> <strong>los</strong> mishos, más será la<br />
pelea entre las personas, inclusive hasta sacarse sangre”. 28<br />
Lo más substancial para un análisis antropológico, es que la<br />
persona que tiene fé en este tipo <strong>de</strong> i<strong>de</strong>as, está convencida <strong>de</strong> su<br />
ocurrencia. Por diferentes motivos, si muere una persona o llegan<br />
visitas al hogar o existen riñas familiares, las personas previamente<br />
ya tenían un relato anticipador <strong>de</strong>l suceso. Ante el <strong>de</strong>senlace <strong>de</strong>l<br />
acontecimiento, reafirman su creencia; “ya ves compadre, te dije,<br />
yo tenía razón cuando anoche escuche aullar a <strong>los</strong> perros”. 29 De<br />
esta manera, fortalecen en el ámbito social estas afirmaciones, que<br />
se transmiten por generaciones como creencias <strong>de</strong>l pueblo y son<br />
28 Entrevista realizada el año 1999 en la ciudad <strong>de</strong> <strong>Luya</strong> a doña Gloria Hidalgo <strong>de</strong> 47<br />
años.<br />
29 Para la mayoría <strong>de</strong> pobladores <strong>de</strong> la región, el aullido <strong>de</strong> <strong>los</strong> perros por las noches, es<br />
un anunciador <strong>de</strong> muerte <strong>de</strong> algún familiar o vecino. La experiencia <strong>de</strong> campo en uno <strong>de</strong><br />
<strong>los</strong> hogares <strong>de</strong> la zona, me permitió observar el comportamiento <strong>de</strong> las personas al<br />
escuchar <strong>los</strong> aullidos. Comenzaban a rezar y a mal<strong>de</strong>cir al animal mal agüero; términos<br />
como “<strong>de</strong>sgraciado quishque mal agüero”, o “ray ese perro Shanduco cuando aúlla es<br />
porque fijo alguien se va a morir”, “ya esta aullando ese perro, laushito quien será se va<br />
a morir”, se escuchan pronunciar en <strong>los</strong> hogares <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> estos aullidos. Este<br />
acontecimiento, es un condicionamiento para que <strong>los</strong> creyentes, <strong>de</strong> un momento a otro,<br />
cambien su comportamiento. Se sienten preocupados e inciertos ante este hecho, el<br />
hogar se torna en un ambiente <strong>de</strong> miedo y espanto, cualquier ruido en el hogar les causa<br />
temor, porque piensan que es la sombra <strong>de</strong> la persona a morir. Me comentaba doña<br />
Paula Fernán<strong>de</strong>z, una <strong>de</strong> mis entrevistadas, que esa noche, ella ya no podía dormir<br />
porque pensaba toda la noche, cual <strong>de</strong> <strong>los</strong> familiares o vecinos iba a fallecer.<br />
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