Untitled - Datasec

Sin embargo, había algunos vacíos, poco se sabía de la vida de Antonio enEspaña y otros pormenores sobre su vida personal y social con importantesfiguras contemporáneas que se cruzaban diariamente con él por las calles deMaldonado.Era difícil conciliar esas carencias con la necesidad que yo sentía de contarlesuna historia entretenida.Fue entonces cuando tomé la decisión de agregar a mi relato, algunos sucesosy situaciones, afines y coherentes con la historia y con lo que se sabe deAntonio, pero que son sólo producto de mis sueños.No dudo que tarde o temprano la vida les hará conocer el inefable vínculo queexiste entre la realidad y el sueño, entre la realidad y los anhelos del alma.Espero que ustedes puedan entender mi decisión. Yo juzgué que ustedesmerecían una historia rica en situaciones y enseñanzas, y a la vez totalmentefiel a la realidad histórica en la que se ambientan las peripecias de Antonio.Intentar lograr todo eso me llevó finalmente un gran trabajo de investigación yde estudio, para poder armarlo con coherencia antes de contárselo a ustedes.-Está todo bien abuelo, me responden muy condescendientes, al tiempo queabandonamos La Pasiva tomados de la mano.Regreso ya en silencio, por el camino de Las Delicias, que es mi preferido,mientras la tarde cae y el aire se hace más fresco. De pronto pienso que unanieta no puede evitar comentarme con ironía:Abu, ¿temías perder la vida como Scherezada en las Mil y una Noches, por esonos has contado esas lindas historias de la vida de Antonio Jesús?Allí me sonrío de su fina malicia para responderle luego lentamente:No, mi cielo, no temía perder la vida, quizás sólo algo de mi sobrevida más alláde este mundo en el recuerdo de ustedes.Fue allí cuando imaginando miradas de incomprensión de mis nietos ante mienigmática respuesta que más adelante les aclararía, miré el reloj, y mientrasme dirigía retrasado a hacer los encargues solicitados, me calmé al recordarque afortunadamente mi señora tenía a una muy querida prima pasando el díaen nuestra casa.156