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14. Incursión a la Isla de GorritiLlegué al emplazamiento de la batería San José al sudeste de la Isla de Gorritique cruzaba fuegos con la batería San Fernando emplazada en la penínsuladespués de haber recorrido en total soledad casi toda la isla y de contemplarpreviamente los restos de la batería de Santa Ana al oeste que defiende elacceso a la ensenada de la Playa Honda. También observé lo que queda de labatería del Norte que cruzaba fuegos con la batería del Medio ubicada en lacosta a la altura del fondeadero de mayor profundidad de la bahía.Apenas poner un pie en la isla, caminé en sentido contrario a las agujas delreloj, desde el minúsculo puerto Cañón donde la embarcación que abordé en elpuerto de Punta del Este dejó a los visitantes, tras recorrer una milla náutica sinnovedad.En el camino observé los restos de una batería que estaba ubicada entre labatería del Norte y la de San José, y recordé que existió una 5ta. batería,según lo expresa el libro de la Prof. María Fernanda Belloso Varela.La ubicación de la batería San José coincidía con el sector de la isla máspróximo a la península y desde allí pude apreciar la estrechez de la boca chica.Desde esa posición imaginé que luego de la recorrida, mis nietos se poníancómodos junto a esta batería y mientras descansaban, alguno de ellos rompíael fuego y comenzaba a hacerme preguntas:-Abu, qué linda, pero al mismo tiempo qué solitaria y deshabitada que me haparecido esta isla. Salvo por las baterías de cañones da la impresión de que lahistoria de estos lugares no ha pasado nunca por ella.-¿Qué piensas que diría Antonio si pudiésemos ir al pasado en la máquina deltiempo para preguntarle?Ante eso yo le respondería:Este era uno de sus lugares preferidos para meditar mientras cumplíacon guardias periódicas apostado en este lugar como soldado del RealCuerpo de Artillería español.157