Edición Digital - Fundación Luis Chiozza
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OBRAS COMPLETAS TOMO V 69<br />
en que un científi co no conozca el griego; pero es un problema en cambio<br />
que lo utilice sin conocerlo. Entonces sugiere que los que ordinariamente<br />
utilizan la palabra “biología” deberían hablar de “zoología” (incluyendo<br />
en la zoología también la botánica) y dejar la palabra “biología” para<br />
los fi lósofos, que hablan de la vida en sentido más completo. Esto vale<br />
también para nosotros como médicos. Desgraciadamente, en medicina<br />
se habla siempre de biología sin comprender que bios se refi ere a cada<br />
ser viviente que es tal en cuanto animado, y animado quiere decir que<br />
tiene una vida con su interioridad. Es tal criterio el que le ha hecho decir<br />
a Portmann, famoso zoólogo de Basilea, que no existe zoe sin bios. Esto<br />
me parece importantísimo. No quisiera sin embargo que mis palabras<br />
fueran sentidas como un desprecio para la medicina tradicional. Quiero ser<br />
claro, pero ante todo confi rmar que no hay desprecio en lo que afi rmo. He<br />
practicado la medicina muchos años y sé cuán importante es este trabajo,<br />
y sé que mañana yo mismo podría necesitar de la medicina tradicional.<br />
Pero debo reconocer que esta actividad, en su tesitura conceptual, es<br />
prevalentemente veterinaria: quiero decir que toma como fundamento la<br />
zoología, es decir la vida contemplada desde afuera; si se hace medicina<br />
sin ligarla con las vivencias interiores del paciente: se hace una medicina<br />
zoológica. Weizsaecker, una vez en España le dijo a un conocido clínico:<br />
“Pero ustedes son todos zoólogos porque contemplan los fenómenos como<br />
se pueden contemplar desde afuera de la vida”. Pienso entonces que se<br />
debería apropiar uno de la palabra “biología” en su sentido más completo<br />
y auténtico. Ya Weizsaecker, por otro lado, sostenía que todo lo corpóreo<br />
tenía un sentido (y es justamente por eso por lo que no puede ser explorado<br />
sólo desde afuera). Es cierto que Weizsaecker era conciente de que ese<br />
postulado debía ser demostrado. Por eso, la medicina psicosomática –como<br />
él decía– debía esperar a un genio como Freud.<br />
¿Cuál es mi posición personal con respecto a esta opinión de<br />
Weizsaecker? Muchas veces he dicho que se trata de una demostración<br />
que no se puede hacer. Más que de mostrar, se trata de asumir una actitud<br />
que es la misma que tuvo Freud frente a la histeria. En sustancia, él dijo:<br />
“Trataré de comprender”. Es como afi rma Jaspers, citado por Ballerini<br />
y Suman: el derecho está. Quería agregar a todo esto una metáfora a la<br />
cual recurro muy a menudo. Cuando uno camina sobre una playa puede<br />
encontrar conchillas y esto no sorprende, dado que para encontrarlas no<br />
es necesario prestar demasiada atención. Pero si encuentran en la arena<br />
una moneda, uno queda sorprendido. Hasta acá se trata de un suceso poco<br />
signifi cativo, pero si a medida que se camina se encuentra siempre más<br />
monedas en la playa, entonces uno no puede dejar de buscar. Yo creo<br />
que esto representa metafóricamente lo que sucede con el símbolo de la