06.05.2013 Views

A mirada do outro - Educación en valores

A mirada do outro - Educación en valores

A mirada do outro - Educación en valores

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

oficiales conforman<strong>do</strong> una política de gestos que diera la s<strong>en</strong>sación de que<br />

España no estaba sola, cuanto la subsidiaria pres<strong>en</strong>cia de Portugal <strong>en</strong> la intrahistoria<br />

escolar. A la España franquista le interesó crear nación, una nueva nación,<br />

y las prácticas escolares rondaron <strong>en</strong> torno a esa idea; la aparición de otras naciones,<br />

especialm<strong>en</strong>te Portugal que ti<strong>en</strong>e una estrecha historia compartida, se pone<br />

al servicio del <strong>en</strong>grandecimi<strong>en</strong>to de la nueva nación española. Esto no era óbice<br />

para que se pusiera un especial cuida<strong>do</strong>, también desde esa misma intrahistoria<br />

escolar, <strong>en</strong> no incomodar al único vale<strong>do</strong>r europeo, junto con el Vaticano, del<br />

Nuevo Esta<strong>do</strong> español, con el que, llega<strong>do</strong> el caso, se podría levantar un nuevo<br />

ord<strong>en</strong> espiritual; de ahí el tópico de la “hermandad reanudada”. Esto corroboraría<br />

también la posición contraria del franquismo a un nacionalismo de corte ibérico:<br />

la <strong>do</strong>ble necesidad de conformar una nueva nación española y de no <strong>en</strong>emistarse<br />

con el país alia<strong>do</strong>.<br />

To<strong>do</strong> esto, como digo, no impide la exist<strong>en</strong>cia cierta de una <strong>mirada</strong> española,<br />

tan escasa como significativa, a la educación portuguesa; incluso es fácil detectar<br />

un innegable, aunque no simétrico, paralelismo <strong>en</strong> las formas de concebirla,<br />

pudi<strong>en</strong><strong>do</strong> establecerse una sintonía clara <strong>en</strong> los principios y la converg<strong>en</strong>cia <strong>en</strong> las<br />

grandes directrices ideológicas al m<strong>en</strong>os hasta finales de los cincu<strong>en</strong>ta, fecha a<br />

partir de la cual <strong>en</strong> las fu<strong>en</strong>tes consultadas cesan las <strong>mirada</strong>s a la educación portuguesa<br />

y se inicia una t<strong>en</strong>d<strong>en</strong>cia diverg<strong>en</strong>te y distanciada. Los motivos de este<br />

nuevo giro ya los hemos señala<strong>do</strong> <strong>en</strong> páginas atrás; y los resulta<strong>do</strong>s los hemos<br />

anuncia<strong>do</strong> y confirma<strong>do</strong>: las relaciones son más formales que reales, más políticas<br />

que sociales; de hecho“Espanha e Portugal moraram de costas”, seguían<br />

vivi<strong>en</strong><strong>do</strong> de espaldas.<br />

Habrá que esperar a la revolución de los claveles del 25 de abril de 1974 para<br />

que España sintiera la necesidad de conocer lo que pasaba <strong>en</strong> Portugal y para que<br />

20.000 especta<strong>do</strong>res, <strong>en</strong> el Festival de los Pueblos Ibéricos de la Universidad<br />

Autónoma de Madrid, <strong>en</strong>tonaran la Grán<strong>do</strong>la Vila Mor<strong>en</strong>a (Sánches Cervelló,<br />

1995). Pero estos son ya los tiempos de la Transición española que no nos compete<br />

a nosotros abordar. <br />

NACIONALISMOS DE ESTADO<br />

165

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!