menores vulnerables: desprotección y responsabilidad penal - ceesg

Más allá en algunos casos de la baja calidad de los servicios que se prestan como
consecuencia del bajo presupuesto, está la imposibilidad de seguirlos prestando que
algunos centros colaboradores se han planteado. Igual ocurre en algunas familias, que
queriendo acoger, materialmente no lo hacen al no poder hacer frente a los gastos que
implica.
Por ello es imprescindible que se haga una valoración realista de los costes
menor/día, ajustando a ellos las correspondientes asignaciones. No se trata de que nadie
haga negocio sino de que se pueda prestar un buen servicio.
De orden menor, pero muy importante en la vida real es que los pagos a los
centros colaboradores por parte de la administración se efectúen a mes vencido y no
transcurridos varios meses como, nos dicen, desde siempre viene ocurriendo, lo que obliga
a algunos centros a buscar la financiación de las entidades bancarias para poder hacer
frente a los gastos que se generan durante esos meses.
En resumen podemos afirmar que el aumento del presupuesto es una condición
indispensable para todo el conjunto del tratamiento de los menores y que la administración
tiene que ser consciente de que sin una ampliación decidida del presupuesto no hay política
posible en materia de menores.
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