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Hombres de Espinoza, gentes del pueblo y soldaditos prorrumpen en una<br />
ovación, interpretando el galimatías según sus deseos. Zamora, sin decir una<br />
palabra, asiente.<br />
Tiburcio mira fijamente a Gaspers, quien le devuelve la mirada. Ambos<br />
hombres se escrutan, como tratando de adivinarse. Tiburcio se inclina sobre la<br />
montura del caballo, unge a Gaspers en la frente con la sangre de la gallina, y<br />
le cita la epístola a los Corintios, 1,4:<br />
TIBURCIO:<br />
Que nadie se engañe: quien se crea sabio, que se vuelva<br />
tonto, que así se volverá sabio.<br />
Gaspers queda desconcertado.<br />
El brujo añade, con convicción absoluta, clavando la mirada en Gaspers:<br />
TIBURCIO:<br />
-Aunque no llegues a verlo, el Reino vendrá.<br />
Un soldadito trae su caballo a Zamora, y éste se prepara a montar. Gaspers se<br />
le acerca, hasta que sus cabezas quedan a poca distancia:<br />
GASPERS:<br />
-Cuñado, ¿Y usted cree que un profeta puede hacernos<br />
ganar?<br />
ZAMORA:<br />
-No, pero cuando el pueblo cree que va a ganar, no pierde.<br />
¡Ensillen!<br />
Zamora salta sobre su caballo, toma una corneta que está amarrada a la<br />
montura, y con su toque personal desata una frenética actividad de partida.<br />
Los caballos caracolean, los soldaditos trotan y la caballería inicia un galope<br />
para colocarse en la vanguardia.<br />
ESCENA 18<br />
INTERIOR. NOCHE. SALA DE LUJOSO HOTEL EN CURAZAO<br />
Para no insistir con el generador de caracteres, un rótulo en la entrada del<br />
hotel o en la sala debe decir: “Curazao Inn”.<br />
Juan Crisóstomo Falcón sigue sentado en el sillón más cómodo ante la gran<br />
mesa del hotel, alumbrada ahora por una lámpara. Hay una confusión de<br />
papeles en la mesa, en la cual destacan un elaborado recado de escribir, con<br />
plumas de ganso, frasco para la arena, barritas de lacre, tintero. Falcón<br />
garrapatea afanoso una carta, interrumpiéndose, poniendo los ojos en blanco y<br />
moviendo los labios, como si hilara el contenido.<br />
Una criada negra comparece ante Falcón, y anuncia, con acento curazoleño:<br />
CRIADA: