sociedad civil y nuevas institucionalidades democráticas en ... - Polis
sociedad civil y nuevas institucionalidades democráticas en ... - Polis
sociedad civil y nuevas institucionalidades democráticas en ... - Polis
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
Asimismo, no podemos olvidar que el derecho de los pueblos a<br />
lograr librem<strong>en</strong>te su desarrollo económico, social y cultural implica<br />
el derecho a la no interfer<strong>en</strong>cia, y el derecho a “disponer librem<strong>en</strong>te<br />
de sus riquezas y recursos naturales”.<br />
Fr<strong>en</strong>te a semejantes desafíos, estamos todos/as llamados a desarrollar<br />
la capacidad de cuestionar y evaluar la acción de qui<strong>en</strong>es ejerc<strong>en</strong><br />
funciones desde el Estado, y a involucrarnos mucho más <strong>en</strong> la<br />
discusión pública, pues una combinación de medidas que ali<strong>en</strong>t<strong>en</strong> la<br />
participación y el compromiso con la transformación de la realidad,<br />
es un primer paso que favorece el ejercicio de todos los derechos.<br />
Muchos críticos de la modernidad han señalado que la gobernabilidad<br />
democrática, concebida de manera unilateral, da cu<strong>en</strong>ta de una cultura<br />
política caracterizada por la subordinación ciudadana al gobierno<br />
autoritario, donde los ciudadanos y ciudadanas se acostumbraron a no<br />
involucrarse <strong>en</strong> los asuntos públicos, y vivieron la política más del lado<br />
de la demanda que del lado de la oferta. A pesar de la alternancia política,<br />
nada garantiza que esta relación viciada <strong>en</strong>tre gobernantes y gobernados<br />
desaparezca. Tampoco la reelección de los gobernantes o la<br />
ampliación de sus periodos de gobierno es garantía alguna. Por el contrario,<br />
las experi<strong>en</strong>cias pasadas muestran que ser electos les permite tomar<br />
cualquier tipo de decisión a nombre de los electores, aunque lo<br />
usual era que éstas fueran tomadas a espaldas de los mismos.<br />
¿Será la participación ciudadana el mejor antídoto para romper<br />
con este tipo de prácticas políticas? Ningún gobierno – o partido<br />
político – por bi<strong>en</strong> int<strong>en</strong>cionado que sea, puede lograr cambios de<br />
profundidad sin la participación de una ciudadanía activa, que abarca<br />
y supera la participación electoral e involucra a muchas organizaciones<br />
y movimi<strong>en</strong>tos sociales 82 .<br />
Por otra parte, el cons<strong>en</strong>so sobre la necesidad de un nuevo paradigma<br />
para la reducción de la pobreza, que incorpore como elem<strong>en</strong>to<br />
clave la participación de las organizaciones de la <strong>sociedad</strong><br />
<strong>civil</strong>, no logró equilibrar el poder y avanzar <strong>en</strong> la superación de<br />
una democracia de “repres<strong>en</strong>tación pasiva” hacia una democracia de<br />
“participación activa”; tampoco logró promover la equidad, la integración<br />
social o el ejercicio pl<strong>en</strong>o de derechos. Aún existe desconfianza<br />
política y social, la cual se refleja <strong>en</strong> el <strong>en</strong>fr<strong>en</strong>tami<strong>en</strong>to <strong>en</strong>tre<br />
los intereses de qui<strong>en</strong>es det<strong>en</strong>tan el poder económico y los intereses<br />
82 Calderón, Fernando ; HOPENHAYN, Martín ; OTTONE, Ernesto “Esa esquiva<br />
Modernidad”, 1996.<br />
Sociedad <strong>civil</strong>, participación ciudadana y democracia <strong>en</strong> el nuevo contexto político de América Latina<br />
231