2.7.4. Montaje del asiento. Fig. 2.7.2. Vista posterior de luz de freno 146 . El asiento montado es del tipo de competencia, por lo tanto no tiene ningún tipo de regulación, para el montaje del mismo se utilizó 2 perfiles cuadrados de 4 cm de ancho con una longitud igual al ancho del asiento, soldados al piso, unidos al asiento por 4 pernos. El asiento montado se puede apreciar en la figura 2.7.3. CAPÍTULO 3 146 Fotografía de la parte posterior de la luz de freno Fig. 2.7.3. Asiento del vehículo 147 147 Fotografía tomada del asiento colocado en el vehículo. 109
3. ANALISIS COMPARATIVO Para concluir el proyecto es necesario hacer un análisis de comparación entre lo proyectado y lo ejecutado, esto es una relación entre lo que se planificó al iniciar el proyecto y lo que se ejecutó en el desarrollo del mismo. El primer problema por afrontar, constituyó el tema económico, pues, el valor presupuestado para el desarrollo del vehículo, es insuficiente, haciéndose necesaria la búsqueda de auspiciantes, personas que creyendo en el proyecto puedan realizar algún tipo de inversión, lo que requirió de esfuerzo, tiempo y dedicación. El proceso de diseño del vehículo permite conocer todos los requerimientos necesarios para dotar al automotor de las cualidades mínimas y máximas posibles, para el cumplimiento del fin u objetivo para el que esta máquina va a ser creada. Así, en tratándose de un vehículo de competencia, se analizó el entorno de seguridad para el conductor, ya que, la ausencia de una de las medidas o principios de seguridad, podrían implicar la integridad del piloto, y hasta la vida misma. Por otro lado, en esta etapa se conoce al detalle todos los sistemas, funcionamiento y utilidad de cada elemento, lo que permite identificar las fallas o daños que se podrían presentar cuando el vehículo se encuentre operativo, adquiriendo por tanto, la capacidad de solucionarlos con un abanico de opciones. EL CHASIS: El proceso de diseño del chasis, podría dividirse en varias etapas, la primera de ellas con resultados bastante errados, pues, los cálculos, diagramas y planos realizados, no cumplían con los parámetros regulares de un vehículo de uso personal. En segunda instancia, el pulir lo propuesto, implicó esquematizar el vehículo como si existiese en la realidad, para con esta base continuar deduciendo y analizando los puntos a cambiarse. Por último, como una tercera etapa, se realizó la adecuación de los sistemas en conjunto, esto es el acoplamiento de todas las piezas requeridas y la correspondiente comprobación de factibilidad. En el proceso de construcción del chasis, se generaron problemas de diversa índole, uno de ellos el del profesional mecánico diestro en construcción de vehículos que pudiera compartir sus conocimientos y asesorar en la producción del automotor. Se evidenció que la ingeniería mecánica automotriz, en la ciudad de Quito, se limita a proveer de servicio de mantenimiento y reparación de daños de vehículos, no hay una 110