ABRIR II PARTE. CAPÍTULO V. - Universidad Complutense de Madrid

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causa del dolor, se mata con la misma espada. El tiranicida pide a la ciudad una recompen- sa, como si hubiese matado realmente al tirano. En su discurso, describe el estado de ánimo de sus conciudadanos, paralizados entre la esperanza de que el tirano muriera, y el miedo al hijo, que como sucesor, hacía la tiranía inevitable: Porque no es pequeño alivio para otros pueblos el poder decir: Nosotros no podíamos tener esta esperanza, pues veíamos preparado ya el sucesor de la tiranía. Por lo mismo, ninguno de nuestros buenos conciudadanos se atrevía á realizar lo que como yo pensaban. Toda esperanza de libertad se había desvanecido, y la tiranía parecía invencible ante la idea de luchar contra tantos” 264 Esperanza y miedo. Cuando Erasmo tradujo por vez primera, del griego al latín, los diálogos de Luciano se quedó prendado con esta imagen hucianesca, haciéndola suya. La emplea ya en su De conscribendis, donde Erasmo juega literariamente con con los términos latinos spes y inetus, y es también Erasmo, en su Institutioprincipis christiani, quien dota a esta imagen de un contenido político, proporcionando una fuente para la divisa filipina: “ Mucho más pestilencial es la laya de magos y de adivinos que auguran a los reyes longevidad, victorias, triunfos, placeres, conquistas. Y, al opósito, profetizan a veces muertes súbitas, desastres, derrotas, destierros, abusando para este fin de la esperanza y del miedo, que son los dos principales tiranos de la vida humana”265. Sabemos que Calvete de Estrella compró en 1542 para el Príncipe una edición latina de este tratado político de Erasmo y de los diálogos de Luciano traducidos por éste. Citas que podrían parecer oscuros, poco destacables dentro de la amplia producción literaria erasmiana, pero las dudas se desvanecen al leer las anotaciones de un anónimo lector del siglo XVI, en un ejemplar de la Omnia opera erasmiana. En el tomo primero subraya estas líneas de Erasmo, en su traducción del diálogo lucianesco, Alejandro o los falsos magos: “factle perpenden¿nr haec duo potissimum in hominum vita iyrannidem obtinere, spem ac mezwn~~266 y más adelante, al detener su mirada en la Institutio princ¡~is christiani, nues- 264.LUCIANO. Obras completas de Luciano. (Madrid, 1914-1917). Trad. de Cristóbal Vidal y F. Delgado. II, pp. 293-294 265 .ERASMO. Educación. Op. cit, p. 311. 266.Luciani Samosatensis dialogi. Apud, ERASMO. Omnia Opera. (Jerónimo Froben y Nicolás Episcopio, Basilea, 1540). 1, p. 197. BNM. Rl 24.385. 578
tro anónimo lector anota al lado del párrafo arriba citado, de una manera muy gráfica: metus’>~ La fórmula, sin embargo, no fue inventada por Erasmo, sino que provenía de una amplia tradición grecolatina. Por esto, no menos importante debió ser para el Príncipe la 268 lectura de las Flores de ilustres poetas, recolectadas por Octaviano Mirandola . En ella, Felipe pudo leer varias piezas poéticas de Horacio, Lucano, Séneca, Terencio y Ovidio que incidían sobre el viejo tema lucianesco de la esperanza y del temor, como motores de la vida humana, y que Erasmo tomaría más tarde como propio. Algunos de estos poemas aparecen marcados levemente con una rayita, en el ejemplar que le perteneció. Es el caso de tres composiciones de Horacio y Lucano, donde la esperanza y el miedo, son vencidos por la fortaleza269. Pero los versos más significativos son éstos de Séneca en su Hercules fi¿rens, sobre la esperanza: “Spes timorque homines moxime agitant”, o los de Terencio, en su comedia Andria: 267 Turbine magno spes sollicitae Vrbibus errant, trepidique mezusr (sic). Ve misero mihi: Vt animus in spe atque in timore usque ante ¡¿tic attentus ftdt. Ita quepostguam adempia spes est, lassus. cura confectus srupet.27U 267 .Ibídem. IV, p. 453. BNM. r/ 24.388. 268.Illvstrivm Poetarvm Flores per Octavianvm Mirandvlani collecti, et & siudioso quodam in Locos communes nuper digesti. ac castigad. Cum Indice locupletissimo. (Amberes, viuda de Martin Caesar, 1539. In 80). RBME. 34-V-24, n0 1. 269. “DE FORT¡TVDINE. 1 Fortis est qui aequanimiter vtranque ¡ fortunam sustinet. 1 Hora. Oda. Hl lib. 2. 0 Sperat in festis. metuit secundus 1 Alteram sortem bene praepara¡um 1 Pectus. 1 Ibidem”. O Rebus angustis animosus. atque ¡ Fortis appare, sapienter idem ¡ Contrahes uento nimium secundo. ¡ Turgida ¡¿eta. 1 Fortissimus est, qidpati metuenda promptus ¡ est si instent, & diferre potest. Lucanus lib. 7. beL ciuil. 1 Qul promptus metuenda pati. si cominus instent, 1 bit disferre potest”. Ibídem, fi. 121v- 122r. 270.Ibtdem, fol. 270r. 579
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