ABRIR II PARTE. CAPÍTULO V. - Universidad Complutense de Madrid

Luis de Villarrasa. Fallecido éste, reclamó que se le retomara, y así se hizo24. Honorato
Juan, una vez más, tuvo que esperar su recompensa como preceptor del príncipe. Estas
desilusiones no disminuyeron el prestigio intelectual del humanista valenciano. Las canas
que desde Roma y Venecia le escribió Páez de Castro nos revelan cómo las preocupaciones
humanísticas que habían imperado en la escuela principesca durante los años anteriores
tenían continuidad. Páez le informa acerca de las novedades biblográficas que se podían
comprar ya en las librerías italianas, le comenta sus trabajos en la biblioteca de Diego
Hurtado de Mendoza, y le anima a continuar sus trabajos sobre Aristóteles, en cuya corras
25
ción ambos se habían propuesto trabajar de manera conjunta . En otras cuestiones se
26
remite a Zurita, amigo común de ambos . Miguel Jerónimo de Ledesma incluyó al final
de su gramática griega (1545), dedicada a doña Mencia de Mendoza, el poema piadoso De
Christi passione, en griego, que el helenista valenciano dirigió a su paisano Honorato Juan.
Construido con sentencias y frases de Homero, tiene 323 versos en total y constituye una de
las escasas muestras de poesía griega en la España del siglo XVI27
En 1546 encontramos a Honorato Juan, “eques valentinus”, como uno de los jueces
que, junto con el abad Luis de la Cadena y el canónigo Fernando de Matategui, dictamina-
ron en la justa poética que se celebró en Alcalá con motivo de la visita que Juan Martínez
de Silíceo, recientemente nombrado arzobispo de Toledo, hizo a la universidad, según
24.Jerónimo de Cabanillas a Felipe (Valencia, 26-jun-1545), agradeciendo que le sea retornada
la tenencia. AGS. E. Leg. 297, fol. 130.
25.” Quanto a las obras de Aristoteles, yo digo a y. m. que es cosa muy grande, porque las
mas de las lacunas en los Morales y principalmente en lo de mirandis auscultationibus están
llenas. El tratado de lineis insecabilibus es muy otro: los Problemas tienen cosas nuevas: lo de
animalibus muy buenas. y. m. tenga paciencia, que todo será comun, quando Dios quisiere
que nos veamos”. (En CERDA Y RICO. Notas al canto de 7bña. Op. ciÉ., p. 473. Juan Páez
de Castro a Honorato Juan. Trento, 8-jun-1546).
26.Escribe: “y porque sé que el señor Geronimo Zurita no tiene cosa que no comunique con Y.
m. me descuido de no escribir las particularidades, que a ¿1 escribo, pues su carta hade venir a
manos de V. m. y asi agora, porque a él escribo largo, aquella suplico a Y. m. haya por
suya”. (Ibídem, pp. 472-473).
27.Cjfra LOPEZ RUEDA. Helenistas españoles del siglo XVI. Op. ci:., p. 405.
627