ABRIR II PARTE. CAPÍTULO V. - Universidad Complutense de Madrid

No en vano, el autor de la mayor parte del programa iconográfico fue Cornelio
Scbryver, o Grapheo, testigo y relator de la entrada de Carlos V en 1520. El arquitecto
Pieter Coeck (1502-1550) dio forma a las ideas de Schryver, si es que no colaboraron acti-
vamente en la invención de las mismas, pues juntos se asociaron para dar a la imprenta la
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relación que mostraba el recibimiento de la ciudad al príncipe don Felipe . Su colaboración
en temas artísticos venía de tiempo atrás, cuando ambos cooperaron en 1539, junto con
Petrus Pierre, en editar una edición flamenca de la obra de Serlio sobre arquitectura, obra
que Calvete conocía, pues la encuadernó en 1545 para el príncipe. Como en Arras, una de
las fuentes directas de Schryver fue la Institutio erasmiana. Así, en el tercero de los arcos,
Checa encuentra que sus motivos (una cigUeña, un cetro, un hipopótamo y otros jeroglífi-
cos), aunque procediendo del difundido tratado de Horapollo, tienen “su cabal explicación
en las palabras de Erasmo, sacadas de su Educación del Príncipe cristiano (1516), en donde
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parece haberse inspirado el autor del programa” . El texto aludido de Erasmo hacía referencia
a la importancia de que los príncipes fueran educados en la doctrina de procurar
siempre el bien de toda la comunidad. Para esto los sabios antiguos empleaban algunos
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jeroglíficos, uno de los cuales, es el escogido por Schryver para este arco . Checa consi-
dera que este lenguaje artístico, pleno de referencias mitológicas y simbólicas, tenía una
doble significación. Por un lado, con la remisión a la AntigUedad se pretendía resaltar las
hazañas del futuro soberano, pero por otro lado, de igual forma, se quería aludir a una
cualidad moral sin la que el paralelismo quedaba sin contenido. “Erasmo -a entender de
Checa- es claro al respecto, y en sus escritos, continuamente salpicados de citas a la Anti-
gUedad y a los dioses paganos, se esboza toda una teoría de la imagen mitológica y alegóri-
206. Vid ROSENBERG, Jakob 1 SLIVE, Seymour 1 TER KUILE, E. H. Arte y arquitectura en
Holanda 16Ck9/1800. (Madrid, 1981), p. 386.
207.CHECA. Carlos Vy la imagen. Op. cii, p. 168.
208.” Húbolos quienes figuraban el cetro del rey con estotro simbolismo: en lo alto de él colocaban
una ciglieña, emblema de la piedad; y en su extremo inferior un hipopótamo, bestia brutal
y dañina. Con este simbolismo entendían que, si en el pecho del príncipe surgían impulsos de
crueldad, verbigracia, ira, acidez de venganza, rapacidad, violencia, etc; la piedad para con la
patria debía sobreponerse y anular aquellos movimientos. Invitan al insolente gobierno la
licencia engendr~ida de la fortuna y el buen suceso de las empresas; pero la caridad de la patria
debe siempre tener preponderancia y primacía”. (ERASMO. Educación. Op. ci:, p. 305).
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