07.05.2013 Views

RE La ciudad de los muertos - La Biblioteca del Cuadrado de Binomio

RE La ciudad de los muertos - La Biblioteca del Cuadrado de Binomio

RE La ciudad de los muertos - La Biblioteca del Cuadrado de Binomio

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

<strong>de</strong> cajas apiladas y una estantería <strong>de</strong> metal llena <strong>de</strong> contenedores metálicos,<br />

justo al lado <strong>de</strong> una puerta <strong>de</strong> carga y <strong>de</strong>scarga.<br />

Acetileno 1 o quizás oxígeno... Dios, ¿qué clase <strong>de</strong> criatura necesita tantas balas<br />

para morir?<br />

Oyó otra andanada <strong>de</strong> disparos, luego un chapoteo en el agua... y un ruido<br />

diferente, un siseo gutural y profundo que le heló la sangre <strong>de</strong> las venas. Era un<br />

sonido extrañamente familiar, pero <strong>de</strong>masiado fuerte para que fuera posible.<br />

Un millón <strong>de</strong> serpientes a la vez, quizás un millar <strong>de</strong> gatos gigantes o,<br />

incluso, algún tipo <strong>de</strong> dinosaurio primitivo y terrible...<br />

Echó a correr, abandonando por fin la pretensión <strong>de</strong> mantener cerrada la<br />

herida. Necesitaba <strong>los</strong> dos brazos para impulsarse si quería avanzar con mayor<br />

rapi<strong>de</strong>z. El final <strong>de</strong>l túnel ya estaba cercano. Vio un panel <strong>de</strong> luces titilantes y<br />

una abertura a la izquierda, otra puerta <strong>de</strong> carga enorme... y se <strong>de</strong>tuvo justo a<br />

tiempo antes <strong>de</strong> cruzarse en la línea <strong>de</strong> fuego cuando sonó otra rápida sucesión<br />

<strong>de</strong> disparos a la vez que una tremenda rociada <strong>de</strong> líquido inundaba el pasillo,<br />

haciendo bajar gran<strong>de</strong>s cortinas <strong>de</strong> agua <strong>de</strong> las pare<strong>de</strong>s.<br />

—¡Alto! ¡Voy a pasar! —gritó.<br />

Entonces oyó la voz <strong>de</strong> Ada. Sintió una enorme oleada <strong>de</strong> alivio a pesar <strong>de</strong>l<br />

horror que, sabía, se encontraba a un paso <strong>de</strong> el<strong>los</strong>.<br />

—¡León!<br />

¡Está viva!<br />

Se plantó <strong>de</strong>lante <strong>de</strong> la puerta abierta con la Magnum en alto y la herida<br />

abierta y sangrando... y vio a Ada al otro lado <strong>de</strong> un lago <strong>de</strong> mugre, cajas y<br />

ma<strong>de</strong>ros rotos que flotaban sobre el turbio y turbulento líquido.<br />

Estaba <strong>de</strong> pie sobre una pequeña plataforma <strong>de</strong> cemento que sobresalía,<br />

<strong>de</strong>trás <strong>de</strong> una escalera, con su Beretta apuntando hacia las agitadas aguas<br />

estancadas en el lugar.<br />

—Ada, ¿qué...?<br />

¡Blaaaaffff!<br />

Un gigantesco surtidor salió disparado <strong>de</strong>l pequeño lago y lo arrojó <strong>de</strong><br />

espaldas hacia el pasillo <strong>de</strong> nuevo. Ocurrió tan <strong>de</strong>prisa que no llegó a verlo<br />

hasta que se encontró por <strong>los</strong> aires, y su mente absorbió la imagen justo cuando<br />

aterrizaba en el suelo. Cayó sobre su hombro herido y lanzó un grito,<br />

provocado tanto por el fuerte dolor como por lo que había visto.<br />

Un cocodrilo...<br />

León se puso en pie y comenzó a alejarse tambaleándose antes <strong>de</strong> saber ni<br />

siquiera si podría levantarse. El gigantesco lagarto, un cocodrilo <strong>de</strong> diez metros<br />

como mínimo, apareció en el pasillo a su espalda lanzando un tremendo<br />

rugido. <strong>La</strong>s superficies temblaron cuando el enorme reptil salió <strong>de</strong> la guarida<br />

que lo albergaba, y su cuerpo arrojó litros <strong>de</strong> agua a<strong>de</strong>más <strong>de</strong> la que resbalaba<br />

por sus fauces abiertas repletas <strong>de</strong> dientes.<br />

Una boca tan gran<strong>de</strong> como yo; no, más gran<strong>de</strong>...<br />

León empezó a correr, sin sentir ya dolor alguno, con el corazón latiéndole<br />

a toda velocidad <strong>de</strong>bido al pánico puramente animal que sentía. Iba a<br />

1 El acetileno es una sustancia muy combustible que se emplea en <strong>los</strong> sopletes industriales. (N. <strong>de</strong>l t.)

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!