07.05.2013 Views

RE La ciudad de los muertos - La Biblioteca del Cuadrado de Binomio

RE La ciudad de los muertos - La Biblioteca del Cuadrado de Binomio

RE La ciudad de los muertos - La Biblioteca del Cuadrado de Binomio

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

—Mierda —dijo con un susurro, pero la palabra no le sonó enfadada,<br />

como ella había esperado. Sonó más bien pequeña y solitaria, casi como una<br />

súplica.<br />

Sherry encajó un codo en el último peldaño al que estaba agarrada, tocó su<br />

colgante para que le diera buena suerte y lo intentó <strong>de</strong> nuevo, empujando <strong>de</strong><br />

veras. Esta vez lo hizo con todas sus fuerzas, y creyó notar que cedía un poco,<br />

un poco... pero ni <strong>de</strong> cerca lo suficiente para po<strong>de</strong>r salir. Bajó la mano y volvió a<br />

soltar un taco, pero esta vez en silencio. Estaba atrapada.<br />

No se movió durante varios minutos. No quería bajar <strong>de</strong> nuevo al agua,<br />

pero tampoco quería creer que realmente estaba atrapada. Sin embargo,<br />

también empezaba a notar el cansancio en sus brazos, y tampoco quería tener<br />

que saltar.<br />

Por fin, comenzó a bajar, a un paso mucho más lento con el que había<br />

subido. Cada peldaño que bajaba era una admisión <strong>de</strong> la <strong>de</strong>rrota.<br />

Cuando había recorrido tal vez la tercera parte <strong>de</strong> la escalera, oyó unos<br />

pasos por encima <strong>de</strong> su cabeza. Al principio, sólo se trató <strong>de</strong> un ligero golpeteo,<br />

más una pequeña vibración que otra cosa, pero pronto se dio cuenta <strong>de</strong> que<br />

eran pasos y <strong>de</strong> que cada vez sonaban más cercanos... Aún más cercanos, hasta<br />

que se aproximaron al extremo superior <strong>de</strong>l pozo don<strong>de</strong> se encontraba.<br />

Por un momento Sherry pensó en no hacer caso <strong>de</strong> <strong>los</strong> pasos, pero luego se<br />

apresuró a subir <strong>de</strong> nuevo por <strong>los</strong> peldaños tras <strong>de</strong>cidir que merecía la pena<br />

correr el riesgo. Cabía la posibilidad <strong>de</strong> que no se tratara <strong>de</strong> Claire ni <strong>de</strong> alguien<br />

dispuesto a ayudarla, pero lo más seguro era <strong>de</strong> que se tratara <strong>de</strong> su única<br />

oportunidad <strong>de</strong> escapar.<br />

Comenzó a gritar antes <strong>de</strong> llegar al final <strong>de</strong> la escalera.<br />

—¡Hola! ¡Socorro! ¿Alguien pue<strong>de</strong> oírme? ¡Hola! ¡Hola!<br />

Los pasos parecieron <strong>de</strong>tenerse, y en cuanto llegó <strong>de</strong> nuevo al techo,<br />

comenzó a golpear el portillo <strong>de</strong> metal con el puño.<br />

—¡Hola! ¡Hola! ¡Hola!<br />

Se dispuso a dar otro golpe con su dolorido puño... pero sólo golpeó el<br />

aire, y una luz cegadora le obligó a cerrar <strong>los</strong> ojos.<br />

—¡Sherry! ¡Oh, Dios mío! ¡Cariño, me alegro tanto <strong>de</strong> verte!<br />

Claire. Era Claire, y aunque Sherry no podía verla, se sintió abrumada por<br />

una inmensa sensación <strong>de</strong> alegría al oír su voz. Unas manos fuertes y cálidas la<br />

ayudaron a salir y luego unos brazos cálidos y húmedos la abrazaron con<br />

fuerza. Sherry parpa<strong>de</strong>ó y entrecerró <strong>los</strong> ojos para distinguir un poco mejor <strong>los</strong><br />

<strong>de</strong>talles <strong>de</strong> la enorme estancia a través <strong>de</strong>l velo blanco <strong>de</strong> luz.<br />

—¿Cómo supiste que era yo? —preguntó Claire, sin <strong>de</strong>jar <strong>de</strong> abrazarla.<br />

—No lo sabía, pero no podía salir por mí misma, y oí pasos...<br />

Sherry miró alre<strong>de</strong>dor, al gran espacio don<strong>de</strong> Claire la había sacado, y se<br />

sintió pasmada y asombrada por el simple hecho <strong>de</strong> que Claire la hubiera oído.<br />

El lugar era enorme, y lo atravesaban <strong>de</strong> lado a lado largas pasarelas metálicas<br />

que lo cruzaban en diagonal... y se dio cuenta <strong>de</strong> que la sección <strong>de</strong> suelo don<strong>de</strong><br />

se encontraba el portillo por el que había salido estaba en la esquina más alejada<br />

<strong>de</strong> la zona más oscura <strong>de</strong> la sala, y que el portillo en sí apenas tenía medio<br />

metro <strong>de</strong> ancho.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!