07.05.2013 Views

RE La ciudad de los muertos - La Biblioteca del Cuadrado de Binomio

RE La ciudad de los muertos - La Biblioteca del Cuadrado de Binomio

RE La ciudad de los muertos - La Biblioteca del Cuadrado de Binomio

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Pero, ¿y si no lo es? ¿Y si Claire se equivoca?<br />

Se quedaron <strong>de</strong> pie fuera <strong>de</strong> un almacén en mitad <strong>de</strong> la helada oscuridad,<br />

<strong>de</strong> pie sobre el gran agujero <strong>de</strong>l suelo, mientras esperaban que <strong>los</strong> ruidos<br />

mecánicos se <strong>de</strong>tuvieran. <strong>La</strong> luna casi llena resplan<strong>de</strong>cía cerca <strong>de</strong>l horizonte, y<br />

Sherry se dio cuenta, por el color azul oscuro <strong>de</strong>l cielo en aquella zona, <strong>de</strong> que<br />

la noche ya estaba muy avanzada y el amanecer estaba cerca. Sin embargo, no<br />

estaba cansada. Sentía miedo y nerviosismo, e incluso a pesar <strong>de</strong> que Claire la<br />

agarrara <strong>de</strong> la mano, no quería bajar a través <strong>de</strong>l negro agujero don<strong>de</strong> podía<br />

encontrarse el horrible monstruo.<br />

Después <strong>de</strong> lo que les pareció una eternidad, el zumbido <strong>de</strong> la maquinaria<br />

se <strong>de</strong>tuvo. Claire se alejó <strong>de</strong>l agujero —el hueco <strong>de</strong>l transporte, lo había<br />

llamado—, y se dio la vuelta hacia el almacén.<br />

—Vamos a ver si po<strong>de</strong>mos llamar al... ¿Sherry?<br />

Sherry no se había movido para seguirla. Se había quedado inmóvil<br />

mirando el agujero, agarrando su amuleto y <strong>de</strong>seando ser tan valiente como<br />

Claire... pero no lo era. Sabía que no lo era, y sabía que no quería bajar a la<br />

oscuridad.<br />

No puedo, no puedo bajar ahí. No soy como Claire, y no me importa nada que<br />

mamá haya bajado por ahí. No me importa nada <strong>de</strong> nada...<br />

Sherry sintió una cali<strong>de</strong>z que le recorría la espalda y levantó la vista<br />

sorprendida. Era Claire, que se había quitado su chaleco y se lo estaba<br />

colocando por encima <strong>de</strong> <strong>los</strong> hombros.<br />

—Quiero que te que<strong>de</strong>s con esto —dijo Claire, y Sherry sintió una<br />

repentina oleada <strong>de</strong> alegría y confusión.<br />

—Pero... ¿por qué? Es tuyo, y vas a pasar frío...<br />

Claire no le hizo caso durante un minuto, mientras la ayudaba a ponérselo<br />

correctamente. Era <strong>de</strong>masiado gran<strong>de</strong> para ella, y estaba bastante cubierto <strong>de</strong><br />

suciedad, pero era la prenda más linda que jamás había tenido puesta. Es para<br />

mí. Quiere que yo me que<strong>de</strong> con él. Claire se arrodilló <strong>de</strong>lante <strong>de</strong> ella. Ahora sólo<br />

llevaba puesta su camiseta negra y sus pantalones cortos, y se quedó mirando<br />

con mucha seriedad a Sherry mientras tiraba <strong>de</strong> las solapas <strong>de</strong>l chaleco y se lo<br />

cerraba mejor sobre el pecho.<br />

—Quiero que te lo que<strong>de</strong>s porque sé que tienes miedo —dijo con<br />

firmeza—, y porque hace mucho tiempo que tengo este chaleco, y con él me<br />

siento capaz <strong>de</strong> patearle el culo a cualquiera, como si nada pudiera <strong>de</strong>tenerme.<br />

Mi hermano tiene una chaqueta <strong>de</strong> cuero con el mismo dibujo, y él sí que patea<br />

<strong>los</strong> cu<strong>los</strong> <strong>de</strong> <strong>los</strong> ma<strong>los</strong>... pero porque me robó la i<strong>de</strong>a.<br />

Sonrió <strong>de</strong> repente. Era una sonrisa cansada pero cálida, y aquello le hizo<br />

olvidar a Sherry cualquier recuerdo <strong>de</strong> su madre, aunque sólo fuera por un<br />

minuto.<br />

—Así que ahora es tuyo, y cada vez que tú te lo pongas, quiero que<br />

recuer<strong>de</strong>s que eres la mejor chica <strong>de</strong> doce años con la que jamás me haya<br />

cruzado.<br />

Sherry le <strong>de</strong>volvió la sonrisa, abrazando con fuerza el chaleco <strong>de</strong> color rosa<br />

gastado para apretarlo contra su cuerpo.<br />

—Y a<strong>de</strong>más es un soborno, ¿verdad?<br />

Claire asintió sin dudarlo ni un segundo.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!