14.05.2013 Views

MaquetaciÛn 1 - Crónicas de la Emigración

MaquetaciÛn 1 - Crónicas de la Emigración

MaquetaciÛn 1 - Crónicas de la Emigración

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

no. Las niñas eran pequeñas y querían ir <strong>de</strong> tiendas y si fuese<br />

posible ir a <strong>la</strong> “calesita”, cuando en pocos segundos y <strong>de</strong> sorpresa<br />

un grupo fuertemente armado, saliendo <strong>de</strong> distintos<br />

automóviles, se aba<strong>la</strong>nzó sobre el matrimonio. Era lo que l<strong>la</strong>maban<br />

un “grupo <strong>de</strong> tareas”. Raimundo se intentó enfrentar<br />

pero fue en vano. A los pocos segundos estaban <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> un<br />

coche con los ojos vendados. Elsita y Laura chil<strong>la</strong>ban <strong>de</strong><br />

horror en medio <strong>de</strong> <strong>la</strong> gente que miraba impávida lo que estaba<br />

sucediendo. Las niñas quedaron abandonadas en <strong>la</strong> calle,<br />

siendo los vecinos <strong>de</strong> <strong>la</strong> zona los que <strong>la</strong>s recogieron y llevaron<br />

hasta <strong>la</strong> casa <strong>de</strong> <strong>la</strong> abue<strong>la</strong> paterna.<br />

Elsa y Raimundo fueron llevados a <strong>la</strong> Escue<strong>la</strong> Mecánica <strong>de</strong> <strong>la</strong><br />

Armada. Un día antes habían sido secuestrados su hermana<br />

Josefina y su marido José Luis Hassan. El grupo Vil<strong>la</strong>flor fue llevado<br />

al centro <strong>de</strong> <strong>de</strong>tención más gran<strong>de</strong> <strong>de</strong> <strong>la</strong> Argentina: <strong>la</strong> tristemente<br />

recordada Escue<strong>la</strong> <strong>de</strong> Mecánica <strong>de</strong> <strong>la</strong> Armada (ESMA).<br />

Susana Leiracha, ex-<strong>de</strong>tenida <strong>de</strong>saparecida que coincidió en <strong>la</strong><br />

ESMA con Elsa, nos cuenta su testimonio cargado <strong>de</strong> emoción<br />

por los momentos <strong>de</strong> horror que vivieron juntas:<br />

Cuando me secuestraron, <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> <strong>la</strong> tortura, varias horas<br />

<strong>de</strong>spués, me llevaron por una escalera <strong>de</strong> mármol a un lugar<br />

que tenía un olor muy especial, era un olor “<strong>de</strong>nso”.<br />

Me <strong>de</strong>positaron en una colchoneta con una capucha gris en <strong>la</strong><br />

cabeza, ca<strong>de</strong>nas en <strong>la</strong>s manos y creo que me dormí inmediatamente<br />

por el cansancio, el dolor y el terror que no cesaba.<br />

No sé cuanto tiempo <strong>de</strong>spués me <strong>de</strong>sperté. Se escuchaban<br />

voces, eran personas comunes que hab<strong>la</strong>ban en voz alta. Presté<br />

más atención, no recuerdo <strong>la</strong>s pa<strong>la</strong>bras pero yo estaba secuestrada,<br />

y el lugar seguro que no era una cárcel, era un instituto<br />

militar o algo parecido. Las personas eran hombres y mujeres.<br />

Intenté lentamente sentar o acomodar <strong>la</strong> capucha para ver lo<br />

que estaba ocurriendo y alguien me lo impidió. ¿Quiénes eran<br />

esas personas que podían conversar en tono doméstico, mientras<br />

que a mí me estaba prohibido?<br />

Simplemente eran los secuestrados más antiguos que yo, en un<br />

turno <strong>de</strong> guarda permisiva que aprovechaban esos valiosos<br />

minutos para conocerse y comunicarse, mientras que los recién<br />

secuestrados como yo <strong>de</strong>bíamos permanecer ais<strong>la</strong>dos y en<br />

silencio por algunos días.<br />

Todas estas pequeñas historias y recuerdos fueron vividos en<br />

los breves momentos escamoteados a los verdugos, cuando no<br />

se sufría por los ruidos, <strong>la</strong>s bocinas, los gritos <strong>de</strong> los torturados<br />

y los golpes; cuando por minutos cesaba el ais<strong>la</strong>miento total,<br />

rutinario y enloquecedor, vivido con <strong>la</strong> capucha sucia y oscura<br />

pegada al rostro sudoroso.<br />

Mulleres da emigración<br />

223

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!