14.09.2016 Views

La Vida de Jesus por Elena de White

EN el corazón de toda la humanidad, sin distinción de etnicidad, religión o clase socioeconómica, hay un indecible deseo ardiente de algo intangible - el alma tan vacía y desconforme. Este anhelo es inherente en la misma constitución del hombre por un Creador misericordioso, para que el hombre no se sienta satisfecho con su presente condición, lo que sea que pueda ser. Pero es posible la experiencia de plenitud espiritual en Jesucristo. El profeta Ageo llama con justicia a Cristo "el Deseado de todas las gentes". Es el propósito de este libro presentar a Jesucristo como Aquel en quien puede satisfacerse todo anhelo - con abundante enseñanza, poder insondable, muchas vislumbres de su vida ejemplar de Jesús de Nazaret.

EN el corazón de toda la humanidad, sin distinción de etnicidad, religión o clase socioeconómica, hay un indecible deseo ardiente de algo intangible - el alma tan vacía y desconforme. Este anhelo es inherente en la misma constitución del hombre por un Creador misericordioso, para que el hombre no se sienta satisfecho con su presente condición, lo que sea que pueda ser. Pero es posible la experiencia de plenitud espiritual en Jesucristo. El profeta Ageo llama con justicia a Cristo "el Deseado de todas las gentes". Es el propósito de este libro presentar a Jesucristo como Aquel en quien puede satisfacerse todo anhelo - con abundante enseñanza, poder insondable, muchas vislumbres de su vida ejemplar de Jesús de Nazaret.

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

ayuda abundante que había provisto para su iglesia. El Espíritu Santo era el más elevado <strong>de</strong> todos<br />

los dones que podía solicitar <strong>de</strong> su Padre para la exaltación <strong>de</strong> su pueblo.<br />

El Espíritu iba a ser dado como agente regenerador, y sin esto el sacrificio <strong>de</strong> Cristo habría sido<br />

inútil. El po<strong>de</strong>r <strong>de</strong>l mal se había estado fortaleciendo durante siglos, y la sumisión <strong>de</strong> los hombres<br />

a este cautiverio satánico era asombrosa. El pecado podía ser resistido y vencido únicamente <strong>por</strong><br />

la po<strong>de</strong>rosa intervención <strong>de</strong> la tercera persona <strong>de</strong> la Divinidad, que iba a venir no con energía<br />

modificada, sino en la plenitud <strong>de</strong>l po<strong>de</strong>r divino. El Espíritu es el que hace eficaz lo que ha sido<br />

realizado <strong>por</strong> el Re<strong>de</strong>ntor <strong>de</strong>l mundo. Por el Espíritu es purificado el corazón. Por el Espíritu llega<br />

a ser el creyente participe <strong>de</strong> la naturaleza divina. Cristo ha dado su Espíritu como po<strong>de</strong>r divino<br />

para vencer todas las ten<strong>de</strong>ncias hacia el mal, hereditarias y cultivadas, y para grabar su propio<br />

carácter en su iglesia. Acerca <strong>de</strong>l Espíritu dijo Jesús: "El me glorificará." El Salvador vino para<br />

glorificar al Padre <strong>de</strong>mostrando su amor; así el Espíritu iba a glorificar a Cristo revelando su gracia<br />

al mundo.<br />

<strong>La</strong> misma imagen <strong>de</strong> Dios se ha <strong>de</strong> reproducir en la humanidad. El honor <strong>de</strong> Dios, el honor <strong>de</strong><br />

Cristo, están comprometidos en la perfección <strong>de</strong>l carácter <strong>de</strong> su pueblo. Cuando él [el Espíritu <strong>de</strong><br />

verdad] viniere redargüirá al mundo <strong>de</strong> pecado, y <strong>de</strong> justicia, y <strong>de</strong> juicio." <strong>La</strong> predicación <strong>de</strong> la<br />

palabra sería inútil sin la continua presencia y ayuda <strong>de</strong>l Espíritu Santo. Este es el único Maestro<br />

eficaz <strong>de</strong> la verdad divina. Únicamente cuando la verdad vaya al corazón acompañada <strong>por</strong> el<br />

Espíritu vivificará la conciencia o transformará la vida. Uno podría presentar la letra <strong>de</strong> la Palabra<br />

<strong>de</strong> Dios, 626 estar familiarizado con todos sus mandamientos y promesas; pero a menos que el<br />

Espíritu Santo grabe la verdad, ninguna alma caerá sobre la Roca y será quebrantada. Ningún grado<br />

<strong>de</strong> educación ni ventaja alguna, <strong>por</strong> gran<strong>de</strong> que sea, pue<strong>de</strong> hacer <strong>de</strong> uno un conducto <strong>de</strong> luz sin la<br />

cooperación <strong>de</strong>l Espíritu <strong>de</strong> Dios. <strong>La</strong> siembra <strong>de</strong> la semilla <strong>de</strong>l Evangelio no tendrá éxito a menos<br />

que esa semilla sea vivificada <strong>por</strong> el rocío <strong>de</strong>l cielo.<br />

Antes que un solo libro <strong>de</strong>l Nuevo Testamento fuese escrito, antes que se hubiese predicado un<br />

sermón evangélico <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> la ascensión <strong>de</strong> Cristo, el Espíritu Santo <strong>de</strong>scendió sobre los<br />

apóstoles que oraban. Entonces el testimonio <strong>de</strong> sus enemigos fue: "Habéis llenado a Jerusalén <strong>de</strong><br />

vuestra doctrina."* Cristo prometió el don <strong>de</strong>l Espíritu Santo a su iglesia, y la promesa nos<br />

pertenece a nosotros tanto como a los primeros discípulos. Pero como toda otra promesa, nos es<br />

dada bajo condiciones. Hay muchos que creen y profesan aferrarse a la promesa <strong>de</strong>l Señor; hablan<br />

acerca <strong>de</strong> Cristo y acerca <strong>de</strong>l Espíritu Santo, y sin embargo no reciben beneficio alguno. No<br />

entregan su alma para que sea guiada y regida <strong>por</strong> los agentes divinos. No po<strong>de</strong>mos emplear al<br />

Espíritu Santo. El Espíritu ha <strong>de</strong> emplearnos a nosotros. Por el Espíritu obra Dios en su pueblo "así<br />

459

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!