ENCUENTROS SOCIALES Y DIVERSIONES - Gobierno de Jalisco ...
ENCUENTROS SOCIALES Y DIVERSIONES - Gobierno de Jalisco ...
ENCUENTROS SOCIALES Y DIVERSIONES - Gobierno de Jalisco ...
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
208 <strong>ENCUENTROS</strong> <strong>SOCIALES</strong> Y <strong>DIVERSIONES</strong><br />
Cabe puntualizar que la transformación no sólo es exclusiva <strong>de</strong> una imagen<br />
por medio <strong>de</strong> la máscara o <strong>de</strong>l vestuario, subir al ring y proyectarla; no es<br />
la transformación nada más aparente, es una transformación corporal proveniente<br />
<strong>de</strong>l interior. El espíritu <strong>de</strong>l personaje emerge mediante la posibilidad<br />
histriónica <strong>de</strong>l actor; si bien la máscara confiere una fuerte proyección, es<br />
imprescindible sumar la técnica y los recursos <strong>de</strong>l <strong>de</strong>portista y, sobre todo, la<br />
capacidad <strong>de</strong> interpelación; es lo que da vida a El Mariscal, a Máscara Mágica.<br />
Esa capacidad <strong>de</strong> evocar emociones, es lo que proyectó a la familia Romero:<br />
Rito (inventor <strong>de</strong> «la tapatía»), Juventino y Pablo Romero; también a Oso Negro<br />
(creador <strong>de</strong>l «abrazo <strong>de</strong>l oso»), o al famoso Gory Guerrero (acunado en<br />
Guadalajara aunque ejerciera en la Ciudad <strong>de</strong> México); a El solitario; incluso a<br />
Mil Máscaras (preparado en Guadalajara, aunque también <strong>de</strong>butó en la capital<br />
<strong>de</strong>l país). En síntesis, para estos guerreros no es sólo el vestuario y la actuación,<br />
sino la comunión <strong>de</strong> esos elementos con la fuerza interior que, motivada<br />
por el público, lo lleva a expandir las posibilida<strong>de</strong>s <strong>de</strong>l personaje.<br />
Así resulta <strong>de</strong> un México <strong>de</strong> pluralidad cultural, una iconografía particular<br />
acor<strong>de</strong> a cada región, incluso a cada arena. <strong>Jalisco</strong>, como po<strong>de</strong>mos comprobar,<br />
no sólo fecunda charros cantores <strong>de</strong> celuloi<strong>de</strong>, también héroes <strong>de</strong> cuadrilátero<br />
que lo distinguen como cuna o, mejor dicho, semillero <strong>de</strong> significativos<br />
luchadores —<strong>de</strong> Guadalajara salieron la mayoría <strong>de</strong> los campeones durante<br />
los años sesenta y setenta—, personajes <strong>de</strong> renombre cultivadores <strong>de</strong><br />
una tradición cultural, incluso familiar. Aclamados son los mencionados Gory<br />
Guerrero o Rito Romero —que comienzan como autodidactas al ver luchar a<br />
los capitalinos en Guadalajara—, el actual ídolo Apolo Dantés —quien asegura<br />
ser el eslabón que liga por primera vez en México tres generaciones <strong>de</strong><br />
luchadores— (véase Dantés, 2001); imagen típica es el Ángel Blanco, el Satánico<br />
o Septiembre Negro, sin olvidar a El Rayo <strong>de</strong> <strong>Jalisco</strong> y el paradigmático<br />
Diablo Velasco (fallecido en 1999), director <strong>de</strong> la primera escuela <strong>de</strong> lucha<br />
libre tapatía y maestro <strong>de</strong> ídolos contemporáneos como Mil Máscaras, Atlantis,<br />
Cien Caras, Plata, Ringo Mendoza, entre otros. Ellos, entre muchos, serán personajes<br />
que doten a tierras tapatías <strong>de</strong> sólidos iconos <strong>de</strong> i<strong>de</strong>ntidad cultural.<br />
En torno a la lucha libre tapatía, se cimienta el imaginario colectivo surgido<br />
principalmente por el beneplácito <strong>de</strong> la gente <strong>de</strong> barriada o <strong>de</strong> poblaciones<br />
aledañas —sea Santa Cruz <strong>de</strong>l Valle, <strong>de</strong> municipios como Zapopan o <strong>de</strong>l