ISAAC ASIMOV HISTORIA DE LOS EGIPCIOS - Sala de Historia
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Isaac Asimov <strong>Historia</strong> <strong>de</strong> los egipcios<br />
conclusiones erróneas. Está claro que en la zona templada septentrional el sol <strong>de</strong><br />
mediodía se halla siempre al sur <strong>de</strong>l cenit. Sin embargo, en la zona templada meridional el<br />
sol está siempre al norte <strong>de</strong>l cenit.<br />
En verdad, la extremidad meridional <strong>de</strong> África se halla en la zona templada <strong>de</strong>l sur.<br />
El hecho <strong>de</strong> que los marinos fenicios informasen sobre la posición norte <strong>de</strong>l sol <strong>de</strong><br />
mediodía, lo que es algo que parecía poco probable a la luz <strong>de</strong>l "sentido común", es una<br />
prueba evi<strong>de</strong>nte <strong>de</strong> que habían presenciado el fenómeno realmente, y <strong>de</strong> que, por<br />
consiguiente, habían circunnavegado África. En otras palabras, no es probable que<br />
hubiesen contado una mentira tan burda si no hubiese sido verdad.<br />
Con todo, la circunnavegación, si bien tuvo éxito como aventura, fue un fracaso<br />
en cuanto a proporcionar información sobre las posibilida<strong>de</strong>s <strong>de</strong> nuevas rutas comerciales.<br />
La duración <strong>de</strong>l viaje fue <strong>de</strong>masiado larga. Por cierto, hasta dos mil años <strong>de</strong>spués no fue<br />
posible llevar a cabo el viaje alre<strong>de</strong>dor <strong>de</strong> África.<br />
Los judíos<br />
Nabucodonosor continuó siendo una amenaza para Egipto a lo largo <strong>de</strong> sus<br />
cuarenta y cuatro años <strong>de</strong> reinado. Sin embargo, <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> Karkemish, Egipto no osó<br />
aventurarse al exterior para enfrentarse a él. En cambio, Necao y sus sucesores<br />
inmediatos prosiguieron la política <strong>de</strong> los faraones nubios contra Asiria. Con dinero y<br />
palabras alentaron a las naciones subordinadas <strong>de</strong> la costa mediterránea a mantener<br />
constantes intrigas y rebeliones con el fin <strong>de</strong> <strong>de</strong>sestabilizar a los temidos cal<strong>de</strong>os.<br />
Una política como ésta, un siglo antes, había permitido a Egipto mantenerse libre<br />
por un tiempo, pero había costado la existencia a Siria e Israel. Judá, que había<br />
sobrevivido al imperio asirio, no había extraído la lección <strong>de</strong> la suerte corrida por sus<br />
vecinos septentrionales. Al preferir el débil Egipto a la po<strong>de</strong>rosa Cal<strong>de</strong>a, estaba dispuesta<br />
a hacer el juego a Egipto y a enfrentarse a los cal<strong>de</strong>os, confiando en las débiles promesas<br />
<strong>de</strong> ayuda egipcias.<br />
En el 598 a. C. Judá rehusó rendir tributo a Nabucodonosor, y Jerusalén fue<br />
asediada; tuvo que capitular, y cierto número <strong>de</strong> sus hombres más importantes, incluido el<br />
propio rey, fueron trasladados a Babilonia, al exilio.<br />
Con todo, durante el reinado <strong>de</strong> un nuevo monarca, siguió jugándose el mismo<br />
juego, pese a las elocuentes llamadas <strong>de</strong> atención <strong>de</strong>l profeta Jeremías, que solicitaba a la<br />
nación que se negase a escuchar a Egipto, pidiendo, en cambio, que se llegase a un<br />
entendimiento con los cal<strong>de</strong>os. Una década <strong>de</strong>spués Judá volvió a rebelarse, y esta vez<br />
Nabucodonosor tomó Jerusalén, <strong>de</strong>struyó el templo y llevó consigo al cautiverio a casi<br />
toda la aristocracia. El reino judío llegó a su fin y lo mismo le sucedió a la dinastía <strong>de</strong><br />
David.<br />
Ni siquiera entonces Nabucodonosor tuvo las manos libres para volverse contra<br />
Egipto. La ciudad fenicia <strong>de</strong> Tiro seguía resistiéndosele, por lo que estimó que no era<br />
conveniente marchar hacia el sur mientras esta po<strong>de</strong>rosa ciudad continuase siendo un<br />
enemigo a sus espaldas.<br />
El profeta judío Ezequiel, <strong>de</strong>s<strong>de</strong> su exilio <strong>de</strong> Babilonia, predicaba confiadamente<br />
que Tiro sería <strong>de</strong>struida y que Egipto sería entonces arrasado <strong>de</strong> un extremo a otro (sus<br />
palabras están en la Biblia), pero las predicciones <strong>de</strong>l profeta no se hicieron realidad.<br />
Tiro, construida sobre una isla rocosa, a cierta distancia <strong>de</strong> la costa fenicia, con<br />
una po<strong>de</strong>rosa flota que suministraba alimentos, y una población capaz <strong>de</strong> luchar con la<br />
testaru<strong>de</strong>z característica <strong>de</strong> las poblaciones semíticas, mantuvo a raya a Nabucodonosor<br />
durante trece años. Del 585 al 573 a. C. Nabucodonosor se aferró a la garganta <strong>de</strong> la<br />
ciudad, con su propia testaru<strong>de</strong>z semítica, y aun así no pudo provocar el estrangulamiento<br />
final. Con el tiempo, el asunto terminó por aburrimiento, con un acuerdo <strong>de</strong> compromiso,<br />
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