ISAAC ASIMOV HISTORIA DE LOS EGIPCIOS - Sala de Historia
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Isaac Asimov <strong>Historia</strong> <strong>de</strong> los egipcios<br />
Alejandría<br />
Ptolomeo hizo <strong>de</strong> Alejandría su capital y <strong>de</strong>s<strong>de</strong> ella gobernó, al igual que los<br />
<strong>de</strong>más Ptolomeos que le sucedieron. En realidad, Alejandría representaba casi todo el<br />
Egipto que contaba algo, en lo que concernía a los extranjeros. Para los egipcios, en<br />
cambio, apenas era una parte <strong>de</strong> Egipto. Los Ptolomeos respetaban las costumbres<br />
egipcias y rendían pleitesía, al menos <strong>de</strong> palabra, a todos los dioses egipcios; nunca hubo<br />
una rebelión realmente seria contra la dinastía extranjera, como las habidas contra los<br />
hicsos, los asirios y los persas. Sin embargo, para los egipcios, Alejandría era un pequeño<br />
rincón no egipcio. Era gobernada según las costumbres griegas y estaba llena <strong>de</strong> griegos y<br />
judíos (estos últimos llegaban libremente como inmigrantes <strong>de</strong>s<strong>de</strong> Ju<strong>de</strong>a, que en aquella<br />
época formaba parte <strong>de</strong>l reino egipcio).<br />
Quizá esto fuese incluso algo bueno <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el punto <strong>de</strong> vista <strong>de</strong> los egipcios. Al<br />
aislar a los griegos en la capital, el resto <strong>de</strong>l país resultaba ser tanto más egipcio.<br />
Así pues, podríamos <strong>de</strong>cir, según la cuenta <strong>de</strong> la vieja, que Alejandría, bajo los<br />
Ptolomeos, era griega en un tercio, en un tercio judía y en el otro egipcia. Consi<strong>de</strong>rando<br />
su prosperidad, su sofisticación, su cosmopolitismo y su carencia <strong>de</strong> historia antigua,<br />
Alejandría era la Nueva York <strong>de</strong> la época.<br />
Ptolomeo I y su hijo Ptolomeo II no se contentaron simplemente con hacer <strong>de</strong><br />
Alejandría una ciudad gran<strong>de</strong>, populosa y próspera. Ambos se afanaron en convertirla en<br />
un centro <strong>de</strong> saber, y en esto tuvieron éxito. (Los dos primeros Ptolomeos estuvieron tan a<br />
la par en esto que es difícil precisar con exactitud cuáles fueron los logros <strong>de</strong> uno y cuáles<br />
los <strong>de</strong>l otro).<br />
Ptolomeo I fue escritor, y elaboró una biografía <strong>de</strong> Alejandro Magno, <strong>de</strong> estilo<br />
directo y sin pretensiones. El hecho <strong>de</strong> que la biografía se perdiese —era una biografía<br />
basada en un conocimiento <strong>de</strong> primera mano— es una <strong>de</strong> las gran<strong>de</strong>s pérdidas <strong>de</strong>l saber.<br />
Sin embargo, un historiador griego, Amano, que escribió cuatro siglos y medio <strong>de</strong>spués,<br />
elaboró una biografía <strong>de</strong> Alejandro que se basa en su mayor parte en la <strong>de</strong> Ptolomeo. La<br />
biografía <strong>de</strong> Amano ha sobrevivido, y a través <strong>de</strong> ella poseemos indirectamente la <strong>de</strong><br />
Ptolomeo.<br />
Ptolomeo I heredó la biblioteca <strong>de</strong>l gran filósofo griego Aristóteles, y no escatimó<br />
esfuerzos para ampliarla. Contrató a un erudito ateniense para que supervisase la<br />
organización <strong>de</strong> una gran biblioteca, que con el tiempo se convertiría en la mejor y más<br />
famosa <strong>de</strong>l mundo antiguo; una biblioteca que no sería igualada y mucho menos superada,<br />
hasta diecisiete siglos <strong>de</strong>spués, hasta que la invención <strong>de</strong> la imprenta generalizó el uso <strong>de</strong>l<br />
libro.<br />
Junto a la biblioteca había un templo <strong>de</strong>dicado a las Musas (Mouseion en griego,<br />
Museum en latín, es <strong>de</strong>cir, Museo) en el que los sabios podían trabajar en paz y sin<br />
molestias, libres <strong>de</strong> impuestos y mantenidos por el Estado. Atenas, que hasta entonces<br />
había sido el centro <strong>de</strong>l saber griego, perdió terreno ante Alejandría en todos los campos,<br />
excepto en el <strong>de</strong> la filosofía. Los intelectuales iban a don<strong>de</strong> había dinero (como suce<strong>de</strong><br />
hoy con la "fuga <strong>de</strong> cerebros", <strong>de</strong>bida a la cual los intelectuales y profesionales europeos<br />
se marchan a Estados Unidos). En su apogeo, se dice, el Museo hospedaba a 14.000<br />
estudiantes, por lo que el establecimiento era como una gran universidad, aun para las<br />
medidas <strong>de</strong> hoy.<br />
Fue en Alejandría don<strong>de</strong> Eucli<strong>de</strong>s elaboró su geometría, don<strong>de</strong> Eratóstenes midió<br />
la circunferencia <strong>de</strong> la Tierra sin abandonar Egipto, don<strong>de</strong> Herófilo y Erasístrato<br />
realizarán enormes progresos en anatomía, y Ctesibio perfeccionó y <strong>de</strong>puró el reloj más<br />
ingenioso <strong>de</strong> los tiempos antiguos, que funcionaba con agua.<br />
La ciencia alejandrina era <strong>de</strong> inspiración principalmente griega, pero la tecnología<br />
egipcia también contribuyó. Si Egipto estaba menos versado que Grecia en la teoría,<br />
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