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imaginación.<br />
El viaje del dragón comenzaba en una espiral donde<br />
tiempo y espacio era intuición total, para luego<br />
pasar a una donde todo era voluntad pura; aunque<br />
es posible que tuviera una causa incluso anterior.<br />
En su desplazamiento, atravesaron un anillo donde<br />
tiempo y espacio eran mente, para continuar<br />
por otro donde la vida era emoción. Finalmente,<br />
llegarían hasta el anillo del cuerpo y de la tierra.<br />
Conforme el dragón y sus tres jinetes avanzaban por<br />
el océano, pude, en mi sueño, ver y sentir cómo la<br />
sensación de peligro aumentaba. Era claro, a juzgar<br />
por los movimientos del hijo del silencio, que algo<br />
los perseguía. Los jinetes se volvieron a ver sin decir<br />
palabra hasta que aquél arqueó las cejas y señaló<br />
con la barbilla el horizonte marino. El hijo de la<br />
furia espoleó el resplandeciente dragón. La bestia<br />
pareció un chasquido. Poco después, una lengüeta<br />
verde apareció en el mar. Era una serpiente de tierra<br />
que pretendía, vanamente, morderse la cola.<br />
Liu Yuan hizo un trazo que se antojó verde en su crepitar<br />
en el espacio.<br />
—La serpiente de tierra —continuó el marino— estaba<br />
asida por las fauces de un enorme continente. Tenía<br />
un río que se ramifi caba en cientos de riachuelos, con<br />
una bruma que la cubría, entretejiendo el frío con<br />
el bosque. Aquel sitio era habitado por primitivos<br />
humanos que se amontonaban en húmedas cuevas<br />
de emociones y sentimientos. Un brillo cruzó las<br />
miradas de los tres jinetes. El luminoso dragón<br />
comenzó a girar sobre sí mismo hasta convertirse en<br />
una nube blanca. Aquél era el lugar donde dejarían<br />
el secreto raptado y por el cual habían pactado hacer<br />
el viaje.<br />
Yuan detuvo su contar y se quedó inmóvil, con los ojos<br />
cerrados. Iba a ser casi mediodía cuando recordé mi trabajo<br />
y realicé una cada vez más frecuente llamada para reportar<br />
una ficticia enfermedad antes de ir a hacer algunas compras<br />
para preparar el almuerzo. Mientras tanto el marino duró<br />
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