11.05.2013 Views

Descargar - Alcaldia Municipal de San Miguel

Descargar - Alcaldia Municipal de San Miguel

Descargar - Alcaldia Municipal de San Miguel

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

La Estrella Azul<br />

Pero, al ir a ponerse éstos, notó que había algo <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong>l<br />

guante <strong>de</strong> la mano izquierda y, sin pestañear, renunció a<br />

ponérselo y se lo guardó en el bolsillo. Cuando hubo llegado a<br />

casa <strong>de</strong> la señora Sommières, lo examinó y extrajo un papelito<br />

enrollado don<strong>de</strong> había unas frases escritas con mano un tanto<br />

trémula:<br />

«Tengo previsto ir a tomar el té mañana, a las cinco, al<br />

Parque Zoológico. Podríamos vernos allí, pero no se acerque a<br />

mí hasta que no esté sola. Tengo que hablar con usted.»<br />

Ninguna firma; no era necesaria.<br />

Una súbita alegría invadió a Aldo y le <strong>de</strong>volvió el buen<br />

humor. Decididamente, a Anielka le gustaban los jardines:<br />

<strong>de</strong>spués <strong>de</strong> Wilanow, los <strong>de</strong>l Bois <strong>de</strong> Boulogne. Pero, aunque lo<br />

hubiera citado en las alcantarillas o en las catacumbas, el feliz<br />

<strong>de</strong>stinatario <strong>de</strong> la nota las habría adornado con todas las gracias<br />

<strong>de</strong>l Paraíso. Iba a verla, iba a hablar con ella, y <strong>de</strong> pronto se<br />

sentía el alma <strong>de</strong> Fortunio.<br />

Para pasar el rato y que no se le hiciera la tar<strong>de</strong><br />

interminable, fue a la vivienda <strong>de</strong>l conserje a telefonear a su<br />

amigo Gilles Vauxbrun. Este, que ya había regresado <strong>de</strong> su<br />

expedición, contestó invitándolo a cenar esa misma noche: irían<br />

a saborear los platos <strong>de</strong> Cubat, un antiguo cocinero <strong>de</strong>l zar<br />

recientemente instalado en los Campos Elíseos, en lo que había<br />

sido el hotel <strong>de</strong> la Païva. 10<br />

—Se come bien —precisó Vauxbrun— y, sobre todo, se<br />

come tranquilo, cosa que no se pue<strong>de</strong> hacer en todas partes.<br />

Nos vemos allí a las ocho.<br />

Como los dos amigos profesaban el mismo respeto a la<br />

puntualidad, se disponían a cruzar juntos la puerta <strong>de</strong>l<br />

restaurante cuando el petar<strong>de</strong>o <strong>de</strong> un coche interrumpió sus<br />

saludos. Junto a la acera acababa <strong>de</strong> parar un Amilcar<br />

<strong>de</strong>scapotable <strong>de</strong> dos plazas, <strong>de</strong> color rojo vivo, a cuyos<br />

ocupantes Morosini reconoció con cierta sorpresa: la<br />

10 Famosa cortesana <strong>de</strong>l Segundo Imperio.<br />

197

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!