11.05.2013 Views

Descargar - Alcaldia Municipal de San Miguel

Descargar - Alcaldia Municipal de San Miguel

Descargar - Alcaldia Municipal de San Miguel

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Juliette Benzoni<br />

contaras tu entrevista con ese bribón <strong>de</strong> Ferrals… ¿Quieres una<br />

copa?<br />

—No, gracias. Sólo he venido a darle un beso. Tengo que ir<br />

a cambiarme.<br />

—Tú te lo pier<strong>de</strong>s. Dile a Cyprien que man<strong>de</strong> que te<br />

preparen ese maldito coche <strong>de</strong> gasolina que apesta y que jamás<br />

podrá compararse con un bonito coche irlandés <strong>de</strong> tiro.<br />

—Me disgusta rechazar tus presentes, pero no es necesario.<br />

El amigo en cuestión vive en el barrio, en la calle Jouffroy. Iré a<br />

pie cruzando el parque.<br />

—Como quieras, pero si no vuelves <strong>de</strong>masiado tar<strong>de</strong> ven a<br />

charlar un rato. Recibir un beso tuyo está convirtiéndose en una<br />

costumbre que aprecio infinitamente. Plan-Crépin, <strong>de</strong>je al<br />

divino Marcel y vaya a <strong>de</strong>cir que no tar<strong>de</strong>n en servir la cena.<br />

Tengo un poco <strong>de</strong> hambre, pero no me apetece estar mucho rato<br />

a la mesa.<br />

La marquesa había terminado <strong>de</strong> cenar cuando Morosini<br />

salió <strong>de</strong> casa para dirigirse a la entrada <strong>de</strong> la avenida Van-Dyck<br />

ro<strong>de</strong>ando la mansión Ferrals, cuyas ventanas, como <strong>de</strong><br />

costumbre, estaban potentemente iluminadas. Aldo envió<br />

mentalmente un beso a la dama que ocupaba sus pensamientos<br />

y se a<strong>de</strong>ntró entre los árboles <strong>de</strong>l parque Monceau con la<br />

intención <strong>de</strong> disfrutar <strong>de</strong> uno <strong>de</strong> esos paseos nocturnos tan<br />

queridos a los corazones enamorados.<br />

Caminaba a su paso rápido y <strong>de</strong>spreocupado, aspirando los<br />

aromas primaverales <strong>de</strong> aquella noche <strong>de</strong> mayo, cuando recibió<br />

un golpe en la nuca, otro en una sien, y se <strong>de</strong>splomó sin hacer<br />

ruido sobre la tierra <strong>de</strong> la alameda.<br />

Se oyó entonces una risa peculiar, aguda y cruel.<br />

212

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!