13.11.2014 Views

revista número 16 - ARTE, ARQUEOLOGÍA e HISTORIA

revista número 16 - ARTE, ARQUEOLOGÍA e HISTORIA

revista número 16 - ARTE, ARQUEOLOGÍA e HISTORIA

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

desde tiempos tempranos Dionisios se manifiesta como<br />

garante de las creencias órficas.<br />

Pero es que, además, el iniciado en los misterios<br />

órficos era consciente de la necesidad de que su alma,<br />

tras la muerte, durante su viaje por el más allá, se<br />

esforzara por mantener la memoria. Ante los peligros<br />

que acechaban al alma, esta tenía que mantenerse<br />

firme para poder vencer esos peligros y tentaciones.<br />

En otro caso, de ser derrotada, quedaría atrapada en<br />

el Hades, sufriría castigos y penalidades y tendría que<br />

volver a encarnarse cuando las divinidades infernales<br />

lo establecieran. Diversas láminas de oro identificadas<br />

en excavaciones de tumbas de iniciados nos confirman<br />

esa creencia en la necesidad de que el alma conserve la<br />

memoria de lo que el hombre habría llegado a conocer<br />

tras la iniciación en los misterios.<br />

Láminas órficas<br />

A pesar de que los antiguos egipcios no compartían<br />

las creencias que los iniciados griegos habrían de<br />

alcanzar acerca de la transmigración de las almas, lo<br />

cierto es que en la escatología órfica si se aprecia el influjo<br />

de las ideas egipcias acerca de la conveniencia de que<br />

el difunto, tras la muerte, se lleve al más allá unos textos<br />

que pudieran ser leídos por el alma y que le ofrecieran la<br />

posibilidad de poder contar con una especie de mapa del<br />

mundo infernal así como de ciertos conjuros que habrían<br />

de facilitar que el iniciado pudiera eludir la amenaza de<br />

quedar atrapado en las regiones infernales.<br />

En el Libro de los Muertos de los egipcios no se<br />

encuentran alusiones a la idea de la posible transmigración,<br />

pero si existen multitud de conjuros que deben permitir<br />

que el difunto pueda vencer los innumerables peligros<br />

que han de amenazarle en el viaje por la ultratumba<br />

para poder así arribar al reino celeste, donde convertido<br />

Arte, Arqueología e Historia<br />

226<br />

Representación de un tema dionisiaco<br />

(Museos Capitolinos de Roma).<br />

en divinidad habría de integrase en la luz de Ra. Los<br />

iniciados egipcios pensaban que además de haber<br />

llevado una existencia justa, acorde con la Regla de Maat,<br />

resultaba necesario llevarse a la tumba un conjunto de<br />

conjuros y fórmulas mágicas que posibilitaran afrontar<br />

esos inmensos peligros con garantías ciertas de éxito.<br />

Los órficos, posiblemente influidos por los egipcios,<br />

también pensaban que una vida de ascetismo y piedad<br />

tampoco aseguraba que el espíritu pudiera hacer frente<br />

de modo adecuado a las amenazas que le esperaban.<br />

Para conseguir liberarse plenamente de la carne, evitar la<br />

reencarnación y alcanzar la unión con la esencia divina,<br />

el iniciado precisaba haber practicado durante su vida<br />

terrena unos ritos específicos de modo que antes de morir<br />

ya conociera lo que le habría de suceder en la ultratumba.<br />

Iniciación era sinónimo de muerte en vida; gracias a la<br />

iniciación, a través de ritos secretos, el individuo moría<br />

al mundo de los hombres comunes y nacía al grupo de<br />

los elegidos, de los que buscaban asegurarse la plena<br />

felicidad eterna.<br />

Pero es que esas dos circunstancias de haber vivido<br />

la experiencia iniciática, anticipándose a la propia muerte,<br />

y de haber tenido una vida piadosa, tampoco aseguraban<br />

que al alma fuera a alcanzar la integración con el Uno.<br />

Las amenazas que aguardaban al difunto –al igual que<br />

sucedía en las concepciones egipcias- aconsejaban<br />

que este viajara provisto de ciertos textos que con sus<br />

indicaciones evitaran que pudiera quedar extraviado en<br />

el temido reino infernal. En el caso de los iniciados en las<br />

creencias órficas estas “guías” se confeccionaron tanto en<br />

papiro, como es el caso del denominado Papiro Derveni,<br />

como en láminas de oro, material menos susceptible de<br />

perecer por el propio transcurso del tiempo.<br />

De los textos para el viaje al más allá que<br />

presumiblemente hubieron de escribirse sobre un soporte<br />

de papiro destaca el citado Papiro Derveni. Pensamos<br />

que en estos casos lo usual es que el libro fuese<br />

consumido por el fuego junto con el cadáver del difunto<br />

en el acto de la cremación, lo que habría impedido su<br />

conservación. En el caso del Papiro Derveni parece<br />

que una circunstancia casual evitó que el mismo fuera<br />

quemado, ya que uno de los leños de la pira cayó sobre<br />

él y lo protegió.<br />

Láminas de oro, el otro soporte utilizado, se han<br />

conservado varias, procedentes de tumbas fechadas en<br />

general entre los siglos IV y III a.C., si bien existe una<br />

romana del siglo II d.C. que nos confirma la continuidad<br />

de estas creencias en estos tiempos más avanzados.<br />

Se trata de unos textos especialmente sugerentes en la<br />

medida en que sus propietarios nunca pensaron que los<br />

mismos habrían de llegar a ser leídos por otras personas.<br />

No son obras literarias destinadas a un público sino<br />

textos iniciáticos, de naturaleza secreta, prohibidos a los<br />

profanos, que jamás deberían haber llegado a nuestras<br />

manos.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!