revista número 16 - ARTE, ARQUEOLOGÃA e HISTORIA
revista número 16 - ARTE, ARQUEOLOGÃA e HISTORIA
revista número 16 - ARTE, ARQUEOLOGÃA e HISTORIA
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
Evidencias Murarias de la Huerta Zambrana<br />
Noria y acueducto pétreo de la Huerta Zambrana<br />
Durante estos primeros años de la Edad Moderna<br />
se desarrolla la primera transformación agrícola de la<br />
Campiñuela, la que permite que progresivamente la tierra<br />
de calma (cereal y legumbres) vaya sustituyendo a una<br />
magnífica masa adehesada de carácter ganadero en la<br />
que la masa de encinar es predominante -acontecimiento<br />
que estuvo apoyado por un corpus ideológico que entra<br />
en el campo de las apariciones marianas que se tratará<br />
en otra ocasión- (aparición de Nuestra Señora la Virgen<br />
de la Encina en el paraje denominado del Chaparral). La<br />
comunidad bañusca da un gran paso económico y social:<br />
de una economía subsidiaria, parásita del Camino de<br />
Andalucía (ventas públicas de Miranda y Guadarromán)<br />
y la cañada merina (pastadero de extremo), salta a un<br />
nuevo modelo socioeconómico que hunde sus pilares en<br />
la roturación de la Campiñuela que vendría acompañada<br />
en siglos posteriores, cuando el olivar inunda la propia<br />
Campiñuela, de una posterior roturación de nuevas<br />
tierras hasta entonces sólo destinadas a uso comunal<br />
como pasto para ganado y aprovisionamiento forestal<br />
(la Dehesa de Navamorquina). En principio fueron los<br />
cereales -trigo, cebada y centeno- y la alternancia<br />
con legumbres -garbanzo, haba, beza y “chorchos” o<br />
altramuces- las especies agrarias que mayor presencia<br />
tuvieron en la producción de la Campiñuela, cultivos<br />
organizados en torno a un sistema de barbecho variable<br />
según la distinta calidad edáfica de las tierras. La<br />
población ganadera trashumante fue paulatinamente<br />
movilizándose hacia el noroeste colonizando un territorio<br />
hasta entonces de exclusivo uso local, pues no eran<br />
otras que las tierras del término privativo aldeano, la vieja<br />
“defesa de Navamorquina” ahora segregada en cuatro<br />
ahijadas de la finca matriz: Navarredonda, El Llano,<br />
Corrales y Navamorquín. Clara muestra de este hecho<br />
son las majadas más antiguas presentes en la Dehesilla<br />
o en Migaldías-Piedras Bermejas.<br />
Para Richard Herr “Agricultura y Sociedad en el Jaén<br />
del S. XVIII” 1996, en el Jaén del siglo XVIII era inevitable<br />
entender la extensión territorial del cultivo del olivar sin<br />
una fase previa de desarrollo exitoso del “grano”:<br />
“Las zonas donde había expansión notable del cultivo<br />
del olivo entre 1750 y 1800 eran regiones donde ya había<br />
una producción de trigo para el mercado, puesto de<br />
manifiesto por la existencia de numerosos cortijos. Se<br />
puede concluir que para establecer los olivares de una<br />
manera intensiva hacía falta una etapa anterior dedicada<br />
al cereal. El cultivo de cereal permitía la acumulación<br />
del capital necesario para la transformación de la tierra<br />
progresivamente en olivares, porque hacía falta unos diez<br />
años para que un estacar de olivos llegase a producir<br />
Arte, Arqueología e Historia<br />
295