13.02.2013 Views

izquierdas

izquierdas

izquierdas

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

Las <strong>izquierdas</strong> latinoamericanas, de la oposición al gobierno<br />

Y es aquí donde entra la fuerte apuesta al ámbito local, como espacio<br />

más propicio para este complemento participativo a la democracia<br />

irremediablemente representativa. ésta ha sido la concepción<br />

dominante sobre el problema desde los años ochenta en los contextos<br />

académicos, concepción desplegada sobre todo por la corriente pluralista<br />

de robert dahl (1991). 2 En el camino hacia una mayor democratización,<br />

aseguraba dahl, “podría intensificarse la vida democrática<br />

en pequeñas comunidades, por debajo del nivel del Estado nacional.<br />

la mayor escala de las decisiones no tiene por qué conducir necesariamente<br />

a un sentimiento de mayor impotencia, siempre y cuando<br />

los ciudadanos estén en condiciones de ejercer un control significativo<br />

sobre las decisiones en todos los asuntos que corresponden a una escala<br />

menor pero trascendente para su vida diaria: la educación, la salud<br />

pública, la planificación urbana, la cantidad y calidad de los servicios<br />

que brinda el sector público local (desde el mantenimiento del buen estado<br />

y la iluminación de las calles hasta la conservación de los parques,<br />

paseos y lugares de recreación, etc.” (dahl, 1991: 385). En sintonía con<br />

su planteo, autores argentinos como José nun han afirmado:<br />

312<br />

[Es] hora de advertir (sobre todo en américa latina) que no existe necesariamente<br />

incompatibilidad entre la democracia representativa y la<br />

democracia directa. En sociedades tan diferenciadas y complejas como<br />

las actuales, no es cuestión de que una remplace a la otra, sino de que<br />

ambas se influyan y condicionen entre sí, distinguiendo cuáles son los<br />

niveles de acción más apropiados para cada una (nun, 2000: 172).<br />

El nivel de acción más apropiado para la participación ciudadana era<br />

entonces el nivel local. Pero además, la participación en su ámbito<br />

específico redundaría en una mejora de la representación. En este sentido,<br />

nun expresaba:<br />

En contextos tan precarios como a los que aquí aludo [se trata de países<br />

latinoamericanos] la defensa de las libertades públicas y la propia<br />

consolidación del gobierno representativo dependen de que se desarrollen<br />

con bastante rapidez múltiples formas de democracia participativa<br />

(nun, 1991: 389).<br />

Esta “crisis de representación” a la que nos referimos provocó, ya durante<br />

los años noventa, la definición del problema de la política como<br />

2 Para la corriente pluralista, la representación política aparece casi como una concesión.<br />

Por eso decimos “irremediablemente representativa”. se comprende a la representación<br />

en virtud del problema de la escala: en la modernidad, ella es sólo un efecto de la<br />

ampliación del tamaño –y la complejidad de ella derivada– de nuestras sociedades.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!