Dossier: Louis Althusser - Dialéktica

particularismos; otras actúan en el sentido de la convergencia y de la afinidad”
(Ídem: 307).
En este sentido, todas las teorías que aparecen en el marco de los
procesos de globalización, que hablan de lo local y lo global, de la
heterogeneización y la homogeneización como procesos que se dan en
simultáneo, no hacen más que corroborar a una escala mayor la forma de
existencia de las sociedades desde un principio. No es una novedad la
convivencia de la diversidad en un mismo mundo ni en una misma sociedad
(en su interior). Lo que sí tal vez sea una novedad es la utilización
consciente y explícita de esta diversidad en función de un sistema económico
capitalista completamente mundializado.
Sin embargo, la idea de la diversidad no es sólo concebida desde
nuestra sociedad. Lévi Strauss nos dice que toda sociedad tiene contacto
con otras y que siempre se evalúa desde las propias concepciones a las
sociedades que no son la propia. Estas formas de abordaje de la diversidad,
por lo general, la ordenan de forma tal que la propia sociedad está en la
cumbre de la perfección o es la meta a alcanzar.
Así, la forma predominante se basa en ordenar las diferentes sociedades
en una línea evolutiva que conduce desde lo más simple a lo más complejo,
en función de un criterio predeterminado. En el caso de la sociedad
occidental, ésta ha establecido una línea de progreso en la cual ella misma
es su punto final, dado que el criterio de ordenamiento se basa en “la
disposición del hombre de medios mecánicos cada vez más poderosos” o
el acrecentamiento continuo de “la cantidad de energía disponible por
cabeza”.
Sin embargo, dice Lévi Strauss, que la sociedad occidental “más
desarrollada” sea la medida de todas las cosas, no es solamente una disposición
ideológica sin base material sino que, de hecho, esta sociedad se
asume -y es asumida por las otras sociedades- como la superior en amplios
sentidos. En sus palabras: “Todas las civilizaciones reconocen, una
tras otra, la superioridad de una de ellas, que es la civilización occidental.
¿No vemos al mundo entero tomar de ella progresivamente sus técnicas,
su género de vida, sus distracciones y hasta sus ropas? (...) Lo que los
países “insuficientemente desarrollados” reprochan a los otros en las asambleas
internacionales no es que los occidentalicen, sino que no les den
suficientemente aprisa los medios para occidentalizarse.” ¿Por qué sucede
esto?
La explicación que nos da Lévi Strauss es sumamente interesante y
nos conduce al punto que queremos abordar. Primero retoma -y descarta
como única explicación- la idea de que la sociedad occidental se ha impuesto
por la fuerza. Si, dice, es cierto, pero eso no me explica por qué ha
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