04.01.2015 Views

radcliffe-ann-los-misterios-de-udolfo

radcliffe-ann-los-misterios-de-udolfo

radcliffe-ann-los-misterios-de-udolfo

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

—No lo sabía, madame —replicó Emily—, pero el conocimiento <strong>de</strong> ello no me <strong>de</strong>tendrá en aconsejaros que adoptéis esa conducta, que necesita no sólo vuestra paz, sino, según me temo, vuestra<br />

seguridad. No <strong>de</strong>béis dudar por esa consi<strong>de</strong>ración ni un solo momento en renunciar a ellas.<br />

—¿Eres sincera, sobrina<br />

—¿Es posible que lo dudéis, madame<br />

Su tía pareció verse afectada.<br />

—No eres indigna <strong>de</strong> esas propieda<strong>de</strong>s, sobrina —dijo—, <strong>de</strong>seo conservarlas para ti. Me has mostrado una virtud que no esperaba.<br />

—¿Es posible que haya merecido vuestro reproche, madame —dijo Emily dolorida.<br />

—¡Reproche! —continuó madame Montoni—, he alabado tu virtud.<br />

—No es momento para hablar <strong>de</strong>l ejercicio <strong>de</strong> la virtud —prosiguió Emily—, porque no hay tentación alguna que vencer.<br />

—Sin embargo, monsieur Valancourt... —dijo su tía.<br />

—¡Oh, señora! —interrumpió Emily anticipándose a lo que podía <strong>de</strong>cirle—, no me hagáis que repare en ello, no me hagáis pensar en un <strong>de</strong>seo tan terriblemente egoísta —a continuación cambió <strong>de</strong> tema y<br />

siguió con madame Montoni hasta retirarse a su habitación para pasar la noche.<br />

A aquella hora el castillo estaba en absoluto silencio y todos sus habitantes, excepto ella, parecían haberse retirado a <strong>de</strong>scansar. Según recorría las amplias y solitarias galerías, polvorientas y silenciosas,<br />

sintió un temor y unas aprensiones sin saber exactamente por qué. Cuando entró por el pasillo, recordó el inci<strong>de</strong>nte <strong>de</strong> la noche anterior, y se apo<strong>de</strong>ró <strong>de</strong> ella una preocupación similar a la que había asaltado a<br />

Annette, pensando que le pudiera suce<strong>de</strong>r lo mismo, porque real o imaginado, le causaría el mismo efecto en su ánimo <strong>de</strong>bilitado. No sabía exactamente a qué habitación se había referido Annette, pero<br />

comprendió que sería alguna <strong>de</strong> las que habría <strong>de</strong> cruzar para llegar a la suya, y con una mirada temerosa hacia la oscuridad, avanzó ligera y con cuidado, llegando a una puerta, <strong>de</strong> la que procedía un leve ruido.<br />

Dudó y se <strong>de</strong>tuvo, y sus temores aumentaron <strong>de</strong> tal modo que no tuvo fuerzas para seguir. Creyó que se trataba <strong>de</strong> una voz humana y se reanimó, pero, un momento <strong>de</strong>spués, se abrió la puerta y una persona<br />

que le pareció que se trataba <strong>de</strong> Montoni se asomó, retrocediendo instantáneamente y cerrando <strong>de</strong> nuevo, aunque tuvo tiempo <strong>de</strong> ver a la luz <strong>de</strong> la lámpara que había en la habitación a otra persona, sentada en<br />

una actitud melancólica junto al fuego. Su terror <strong>de</strong>sapareció, pero dio paso a su asombro por la <strong>misterios</strong>a actitud secreta <strong>de</strong> Montoni y por el <strong>de</strong>scubrimiento <strong>de</strong> una persona que le visitaba a medianoche en<br />

una habitación que llevaba tanto tiempo cerrada, y <strong>de</strong> la que se contaban cosas tan extraordinarias.<br />

Mientras, continuaba así, en dudas, dispuesta a vigilar <strong>los</strong> movimientos <strong>de</strong> Montoni, al mismo tiempo que temiendo irritarle si lo <strong>de</strong>scubría, la puerta se abrió <strong>de</strong> nuevo con precaución y se cerró <strong>de</strong> inmediato<br />

como antes. Entonces avanzó sin hacer ruido hasta su cuarto, que estaba dos puertas más allá y, tras <strong>de</strong>jar su lámpara, volvió a un rincón oscuro <strong>de</strong>l pasillo para observar a aquella persona, vista a medias, y<br />

para asegurarse si se trataba efectivamente <strong>de</strong> Montoni.<br />

Esperó en silencio durante unos minutos, con <strong>los</strong> ojos fijos en la puerta, que se abrió <strong>de</strong> nuevo, apareciendo la misma persona, que efectivamente era Montoni. Salió con precaución, mirando a todos lados,<br />

cerró la puerta y siguió por el corredor. Poco <strong>de</strong>spués Emily oyó cómo cerraban con cerrojo por <strong>de</strong>ntro, y se retiró a su habitación asombrada <strong>de</strong> lo que había visto.<br />

Eran las doce. Al cerrar el ventanal oyó pasos en la terraza inferior, y vio con dificultad a varias personas que avanzaban y que pasaron por <strong>de</strong>bajo. Oyó ruido <strong>de</strong> armas y un momento <strong>de</strong>spués la<br />

contraseña. Recordó las ór<strong>de</strong>nes que había oído dar a Montoni, y teniendo en cuenta la hora, comprendió que eran <strong>los</strong> hombres que cambiaban la guardia <strong>de</strong>l castillo. Se quedó escuchando hasta que todo<br />

quedó en silencio y se retiró a dormir.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!