BOLETIN Tomo LXVIII Núms. 277-278 Julio-diciembre
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POSESIONES 119<br />
En el marco de la celebración del Bicentenario de la Independencia,<br />
sería muy apropiado que los gobiernos departamental y municipal, se<br />
abocaran a enaltecer la labor que hizo este mestizo en pro de la promoción,<br />
protección y desarrollo de los derechos humanos, sintetizado<br />
en su célebre Memorial de Agravios, que llevó a España justamente<br />
300 años antes que el payanés Camilo Torres hablara sobre el mismo<br />
tema. La Alcaldía o el Concejo Municipal de Tunja, deberían también<br />
crear la Orden de los Derechos Humanos Diego de Torres; repatriar los<br />
restos que están enterrados en Madrid, es un clamor del pueblo<br />
turmequense, quienes así lo han solicitado en varias oportunidades;<br />
así mismo, rescatar la casa donde nació en la calle 19 entre las carreras<br />
12 y 13 frente al SENA, para que la destinen al Museo de la Indianidad<br />
y el Mestizaje, en donde se vaya enriqueciendo su patrimonio con objetos<br />
que le den a los visitantes: estudiantes, turistas, investigadores y<br />
público en general, un conocimiento de nuestra historia.<br />
Comentarios críticos<br />
a) De Germán Arciniegas 1<br />
“Gilberto Abril Rojas, escritor boyacense que ha sacado del olvido<br />
de siglos la vida del Cacique, recogiendo toda la documentación que<br />
permanecía muerta en los archivos, se ha hecho acreedor a nuestra<br />
gratitud y merece todos los elogios. El viaje del Cacique de Turmequé<br />
es la proeza, no por olvidada menos digna de alabanza, que coloca a<br />
los indígenas de la Nueva Granada en primera línea entre los defensores<br />
de los derechos humanos en Nuestra América. Turmequé está en el<br />
corazón mismo del reino de los chibchas. La lección que el Cacique les<br />
da a las autoridades coloniales en América resulta conmovedora por<br />
ese empeño en presentar ante el Rey lo que, en justicia, debe considerarse<br />
como elemental en el pueblo conquistado”.<br />
b) De Jaime Mejía Duque 2<br />
“La segunda sangre es una obra que ha elegido de antemano su<br />
propio público. Se trata precisamente de ese tipo de lector para quien<br />
cuenta ante todo la forma tradicional de la novela realista.<br />
1 Arciniegas, Germán. “El de Turmequé”. Diario El Tiempo, Bogotá. Pag. 5ª, Jueves, 5<br />
Junio de 1997.<br />
2 Mejía Duque, Jaime. “La segunda sangre”, novela histórica de Gilberto Abril Rojas.<br />
Bogotá, Septiembre de 1995.