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Por lo tanto, con este tipo de Egos del trasfondo oscuro de la mente interior, que es el Ego de la
envidia, se sufre innecesariamente por lo que consiguen los demás individuos humanos, lo que nos lleva
a hacer continuas comparaciones, a competir y a confrontarse con los demás individuos humanos, lo que
nos puede llevar a una absurda obsesión fanática, por ser más que todos los demás individuos humanos,
que incluso se puede llegar a que ese individuo humano que tanto se envidia, a tratar de hacerle
secretamente el mayor daño posible, como es por ejemplo no dejarle de una manera sibilina, integrarse
en el sistema.
De hecho, este Ego de la envidia va en contra de la confianza, que se establece entre dos
individuos humanos que se quieren mutuamente, porque pueden estar agradecidos el uno al otro por
cualquier detalle, ya que existe una intimidad muy bonita, es decir, una compenetración mutua, ya que
cuando llega el amor se confían los secretos más íntimos a ese otro individuo humano que tanto te gusta,
si bien por otro lado, no es más que un estado de enajenación metal transitorio, ya que la realidad te
vuelve a tu sitio como individuo humano, ya que el Ego del trasfondo oscuro siempre acaba haciendo de
las suyas, es decir, se le hace ver a cada individuo humano, que tiene que subsistir sin el otro, dado que
por mucho que se crea que se necesita al otro individuo humano para ser feliz y acercarse un poco más a
la infinitud de la eternidad, lo cierto es que cada individuo humano debe salvarse por si solo, ya que el
dolor de la soledad de la conciencia se acaba imponiendo, porque el Ego del trasfondo oscuro de la
mente interior de cada individuo humano si una cosa quiere, es no morir jamás, y esa es la única realidad
que existe al final.
De esta manera, cuando entre una pareja empieza a faltar la complicidad del diálogo secreto, es
porque este Ego del trasfondo oscuro acaba triunfando sobre la conciencia, que es la felicidad del
acercamiento a la infinitud de la eternidad, o lo que es lo mismo que decir, que cuanto más feliz y alegre
se siente un individuo humano, en teoría menos ganas tendrá de ser malo, porque cuando un individuo
humano se comporta de manera hostil con los demás individuos humanos, es porque su Ego del
trasfondo oscuro de la mente interior, siente miedo, es decir, tiene miedo a desaparecer físicamente del
planeta tierra.
De hecho, una manera de ver este miedo a la muerte física, que tiene el Ego de cada individuo
humano, es a través de la pupila del ojo, que es el reflejo del yo profundo, es decir, de la mente interior,
de la que se acaba apoderando el Ego del trasfondo oscuro, y de aquí que se produzcan una serie
incomprensiones continuas hacia cada uno de nosotros mismos, ya que estamos muy cargados de
energías negativas, sobrevenidas por causa del Ego del trasfondo oscuro.
No obstante, el individuo humano está bastante acostumbrado a disimular dichas energías
negativas, que le causan tanto desasosiego, es decir, a aparentar que es más feliz de lo que lo es en la
realidad, ya que interiormente en general el individuo humano es bastante infeliz, ya que su Ego del
trasfondo oscuro de la mente interior siempre quiere más, nunca se conforma con lo que es y tiene, ya
que dos de los centros psicofísicos de la energía de la vida, a saber, el centro mental y emocional, se
identifican con todo lo que le ocurre al Ego del trasfondo oscuro de la mente interior de ese individuo.
De hecho, para que no exista ninguna clase de identificación, con lo que piensa el Ego del
trasfondo oscuro de la mente interior, el individuo humano necesita intentar ponerse en el lugar de los
demás individuos humanos, aprovechando los breves instantes en los que la claridad de la luz de la
conciencia, es capaz de vencer al Ego del trasfondo oscuro de la mente interior, que es lo que se
denomina empatía, y que provoca la aparición de una nueva circunstancia, que es este caso es más
positiva, pero que pronto se esfuma, al vencer el Ego del trasfondo oscuro sobre la conciencia de cada
individuo humano, que es el que produce la permanente insatisfacción que llevamos en nuestro interior,
todos y cada uno de los individuos humanos.
No obstante, una manera de intentar rebajar esta permanente insatisfacción, es aceptando que
tenemos mucho amor propio y orgullo, que es lo que hace que en nuestras relaciones personales con los
demás individuos humanos, nos encontremos a menudo dolidos, por algo que nos hicieron o dijeron y no
esperábamos que nos hicieran o dijeran, dado que el amor propio acaba siendo el mejor protector que
tiene el Ego del trasfondo oscuro de cada individuo humano.
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