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destruyen así mismos mediante el suicidio, ni socialmente entre ellos en guerras, ni someten a sus
semejantes para sacar beneficio propio de ello, ya que a diferencia del individuo humano, que en su
mente interior, guarda oculto el Ego del trasfondo, los demás animales sólo son agresivos contra si
mismos y sus semejantes, cuando hay presiones ambientales, como puede ser el exceso de población,
que produce tal desequilibrio ecológico, que hace que estos animales agredan a los de su propia especie,
por su propio instinto de supervivencia.
El vocablo manía, es otro rasgo psíquico del fondo psicológico del individuo humano, que le
provoca fragilidad, y que consiste en la instigación de las facultades intelectuales, y que va a implicar un
comportamiento posterior excitable, y la causa que provoca estas manías, es el Ego del trasfondo oscuro
de la mente interior, que es el que origina la falta de autocontrol personal, es decir, las manías tienen
lugar por el desequilibrio del centro emocional, convirtiéndose en hábitos y vicios mecánicos,
inconscientes, que no salen si los controlamos.
De esta manera, los individuos humanos tenemos una serie de vicios que salen hacia fuera, si no
somos capaces de controlarlos, y tales vicios pueden ser la piromanía, que consiste en el éxtasis que
produce a este fondo psicológico el ver arder el fuego, la cleptomanía, que es una tendencia al robo, que
tiene el yo ladrón que todos llevamos escondidos en nuestro Ego del trasfondo, igual que el yo asesino,
pero que nos cuesta admitir, igual que nos cuesta admitir, la sexomanía, que se produce por este
descontrol del centro emocional, que es un vicio que encierra la degeneración sexual, aunque lo
perjudicial y anormal de siempre, se está convirtiendo ahora a inicios del tercer milenio en algo normal y
saludable a nivel público, sin duda por el eco que de ello se hacen los medios de comunicación social,
que pretenden convertir al individuo humano en puro objeto sexual de sus programaciones.
Por tanto, si hasta ahora hemos visto que los individuos humanos tenemos por una parte una
personalidad, y por otro lado, un fondo psicológico, que manifiesta los rasgos psíquicos de la fragilidad
humana, tenemos que explicar la causa que provoca la existencia de todos estos rasgos psíquicos del
fondo psicológico, y del cual percibimos tanta fragilidad humana, y la causa de todo ello, es el trasfondo
oscuro de la mente interior, donde se encuentra el Ego, que nos impulsa desde dentro a actuar de una
manera negativa y equivocada, ya que si en la personalidad, el Ego se expresa en el mundo físico de las
formas de la vida cotidiana, es decir, a través del Ego de los requerimientos de lo que el mundo quiere
de mi, que es el Ego que construye la ley de la vida cotidiana, y en el fondo psicológico el Ego se
expresa por ejemplo a través de los traumas y complejos, en cambio nada sabemos en general, del
trasfondo, que es el bajo fondo psicológico, que nos provoca toda la fragilidad que sentimos y
expulsamos hacia fuera, a través de los rasgos psíquicos del fondo.
Por todo esto, el Ego es el perjudicial ciudadano que vive por excelencia en el mundo del
trasfondo, y que se refleja en el fondo psicológico, a través de los rasgos psíquicos de la fragilidad
humana, pero este mundo del trasfondo se refleja también en el mundo físico de la vida cotidiana, es
decir, en el mundo de las formas, a través de la personalidad.
Este Ego del trasfondo oscuro de la mente interior, maneja la mente, que es la parte energética del
cerebro, las emociones y el cuerpo físico y como consecuencia de ello, anula la conciencia que está en el
trasfondo, que es el ámbito psíquico más desconocido del individuo humano, pero lo cierto, es que en
este trasfondo, el Ego tiene aprisionada a la conciencia, la cual no se puede expresar y por ello los
individuos humanos estamos sujetos a través del Ego, frente a los seres de conciencia despierta, que
tienen un cien por cien de luz, es decir, son individuos autoconscientes, que viven en el cuarto estado de
conciencia, el nous, y tienen una personalidad atmica.
Pero lo cierto, es que los individuos humanos estamos sujetos a la vida por el Ego del trasfondo,
que es el que colectivamente construye la ley de la vida cotidiana, que es el Ego de los requerimientos
de lo que el mundo quiere de mí, y que es el que provoca, la acción reacción, es decir, el ojo por ojo,
diente por diente, ya que si la conciencia no estuviese aprisionada por este Ego del trasfondo, la
conciencia haría que el individuo humano actuase mediante la conducta acción y reflexión, que es saber
hacer las cosas de buenas maneras, por ejemplo, mediante acuerdos, o dando conocimientos a la
humanidad, ya que la conciencia es la verdad sobre todo.
Pero en el trasfondo se manipula a la conciencia, a través del Ego, que es el ciudadano perjudicial
para cada conciencia individual humana, y la conduce tanto al inconsciente, como al subconsciente,
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