Descarga gratuita en PDF - El Taller del Poeta

Pero el Ego del trasfondo oscuro de la mente interior de cada individuo humano, que es la creencia
de lo autoconsideración que somos cada uno como individuos humanos que somos, niega la posibilidad
de que los individuos humanos seamos interdependientes los unos de los otros, es decir, pretende que se
siga manteniendo a los individuos humanos como una relación autoconcentrada en si mismos, que acaba
creando una separación artificial, que no es real, entre los individuos humanos.
De hecho, esta separación es artificial, porque se nos hace creer por parte del Ego que construye y
pone en marcha la ley de la vida cotidiana, que esta separación es real, es decir, que es la única realidad
que existe de verdad, cuando es todo lo contrario, y aun cuando por encima, determinados dominantes
Egos del trasfondo oscuro de unos pocos individuos humanos, han colaborado para que así se creyera,
que únicamente existe una realidad, como realmente existente.
Este control que ha hecho un determinado sector de Egos del trasfondo oscuro de unos pocos
individuos humanos, que sibilinamente han colaborado para que se creyera que existe una única
realidad, como realmente existente, son los mismos que hacen sentir mal a cada individuo humano,
cuando se ama a sí mismo, desde la claridad de la luz de su conciencia.
En este caso concreto, la tradición religiosa del catolicismo, parece que ve con muy malos ojos, el
que un individuo humano se ame a si mismo, y aun cuando si uno se ama a si mismo, desde la claridad
de la luz de la conciencia de cada individuo humano, es cuando se puede intentar dar amor, no al
contrario, es decir, cuando cada individuo humano se ama a si mismo, desde el Ego del trasfondo oscuro
de la mente interior de cada individuo humano, que es cuando aunque no lo parezca, el individuo
humano menos se ama.
No obstante, si todos y cada uno de los individuos humanos, quieren intentar sobrevivir, tienen que
hacer un esfuerzo por adaptarse al Ego de los requerimientos de lo que el mundo quiere de mi, y por lo
cual se ve obligado a amarse a sí mismo, desde su respectivo Ego del trasfondo oscuro de la mente
interior, que aunque no lo parezca, es cuando el individuo humano menos se ama..
De hecho, todo esto se puede ejemplificar, cuando se dice que es desde la claridad de la luz de la
conciencia de cada individuo humano, desde donde se tiene que amar a si mismo, cada individuo
humano, ya que no se puede dar amor a los demás, si antes no se quiere uno a si mismo, no desde el Ego
del trasfondo oscuro, sino desde la claridad de la luz de la conciencia, ya que es como una madre, que
puede no puede dar pecho a su hijo, si ella primeramente no se cuida en todo lo que hace,
principalmente en cuestión de la alimentación.
Todo esto deriva, en que socialmente, y por seguir con el ejemplo de más arriba, si la tradición
religiosa del catolicismo, parece que ve con muy malos ojos, el que todos y cada uno de los individuos
se amen a sí mismos, lo cierto, es que socialmente si la gente tiene miedo a ser egoísta, por causa de ser
algo muy mal visto, desde los dominantes Egos del trasfondo oscuro de unos pocos individuos humanos,
los cuales han controlado este impositivo Ego de los requerimientos de lo que el mundo quiere de mi,
desde siempre, lo que va a llevar a la gente, a ser todavía más egoístas.
Por tanto, es este a su vez, controlador social, e impositivo Ego de los requerimientos de lo que el
mundo quiere de mi, lo que va a llevar no sólo a que la gente sea cada vez más egoísta, sino que ante los
demás individuos humanos, le va a hacer presentarse, como alguien completamente rígido.
Habrá individuos humanos que se pregunten que hay que hacer para amar, a lo que hay que
responder, que hay que amarse a uno mismo desde la humildad de la claridad de la luz de la conciencia
de cada individuo humano, y no desde el Ego del trasfondo oscuro de la mente interior de cada
individuo humano, ya que cuando se ama desde el Ego del trasfondo oscuro, siempre se acaba por
recibir algo a cambio que nunca da llegado.
Pero todo esto ocurre, porque el verdadero amor que surge desde la claridad de la luz de la
conciencia de cada individuo humano, siempre es gratuito.
Pero además de ser gratuito, este amor que surge desde la claridad de la luz de la conciencia de
cada individuo humano, es un amor libre que brota desde lo más profundo y auténtico de la mente
interior de cada individuo humano, es decir, desde la libertad de la conciencia, que es distinto a la
libertad de la soberbia que demuestra el Ego del trasfondo oscuro de cada individuo humano, cuando
368