Descarga gratuita en PDF - El Taller del Poeta

Es decir, es a través del Ego del trasfondo oscuro de la mente interior de cada individuo humano,
cuando se tiene la capacidad para socializar por parte del Ego del trasfondo oscuro de esos pocos
individuos humanos, que manejan estas ideas manipuladas por su Ego del trasfondo oscuro de la mente
interior, en la creencia de que el individuo humano, es una conciencia separada de las demás
conciencias, cuando a decir verdad, esta separación es propia del colectivo y público Ego que construye
y pone en marcha la ley de la vida cotidiana.
No obstante, esto no es óbice para señalar, que esta separación si bien es propia del colectivo y
público Ego que construye y pone en marcha la ley de la vida cotidiana, a su vez viene dada por el dolor
de la soledad de la conciencia, dolor que a su vez viene causado por el Ego del trasfondo oscuro de la
mente interior de cada individuo humano, el cual jamás quiere morir, además de ser un dolor que no
tiene cura, porque es una condición de la conciencia sobre la que no se tiene capacidad de actuar.
Por tanto, todo esto es la llamada sensación de separación continua entre las conciencias de todos y
cada uno de los individuos humanos, y que viene motivada por el Ego del trasfondo oscuro de la mente
interior de cada individuo humano, sensación en la que continuamente nos vemos obligados a vivir,
dentro de la cotidianidad de la vida de los individuos humanos, es decir, dentro del Ego de los
requerimientos de lo que el mundo quiere de mi.
De esta manera, esta separación continua entre las conciencias de todos y cada uno de los
individuos humanos, pertenece igualmente al esfuerzo que hace el Ego del trasfondo oscuro de esos
pocos individuos humanos, quienes controlan a los demás individuos humanos, cuyo Ego del trasfondo
oscuro de la mente interior, no es capaz de dejar de depender del dolor de la soledad de la conciencia, lo
que favorece la restricción de la libertad individual, que nace de la claridad de la luz de la conciencia.
Es decir, favorece la falsa y aparente libertad, que nace del Ego del trasfondo oscuro de la mente
interior de cada individuo humano, que lo que hace de verdad, es esclavizar al individuo humano, en los
prejuicios del Ego que construye y pone en marcha la ley de la vida cotidiana, y por tanto, no
favoreciendo de esta manera, sino todo los contrario, perjudicando la creatividad y la imaginación de
desarrollar por la conciencia de cada individuo humano, la búsqueda de la comprensión de la realidad.
De hecho, lo que busca el Ego del trasfondo oscuro de la mente interior de cada individuo humano,
inducido por la determinante influencia del Ego del trasfondo oscuro de esos pocos individuos humanos,
que manejan a los demás Egos, dentro del Ego que construye y pone en marcha la ley de la vida
cotidiana, es que todos y cada uno de los individuos humanos, no sean capaces de comprender, que el
dolor de la soledad de su conciencia, no es el único que existe, maximizando de esta manera, no sólo la
intensidad de dicho dolor, sino la separación entre las conciencias.
Es decir, lo que se maximiza de esta manera, no es sólo la intensidad de dicho dolor de la soledad
de la conciencia, sino la cada vez más separación física y emocional entre conciencias, ya que lo que no
quiere el Ego del trasfondo oscuro de esos pocos individuos humanos, que manejan al Ego del trasfondo
oscuro de todos los demás individuos humanos, es que el individuo humano en general, no sea capaz de
comprender, que el dolor de la soledad de la conciencia, no es el único que existe.
Por tanto, a esta falta de comprensión, hay que añadirle un continuo significado emocional, que
parte del Ego del trasfondo oscuro de la mente interior de todos y cada uno de los individuos humanos,
por el cual, la conciencia de cada individuo humano, que siente dicha separación entre conciencias,
necesita de las conciencias de los otros individuos humanos, para tratar de aminorar los efectos de dicha
separación.
Es decir, se hace necesario pedir ayuda a las otras conciencias, lo que se consigue logrando su
comprensión y viceversa, y de este modo, hay que hablar y escuchar a la vez, lo que significa que por
unos fugaces instantes, el Ego del trasfondo oscuro de la mente interior, no es capaz de vencer sobre la
conciencia de cada individuo humano, y de este modo, al menos por esos instantes, las conciencias se
reconocen mutuamente las unas a las otras, y lo que afectivamente implica todo eso.
De hecho, si cada una de las conciencias se admiran mutuamente las unas a las otras, cada
conciencia sentirá por esa otra conciencia que la admira, esa misma admiración, dado que la admiración
de una, arrastra la admiración de la otra, aunque cuando se da una exagerada admiración mutua o una
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