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da a cada individuo humano, como es la creatividad de su conciencia, la cual, en vez de producirse
momentáneamente por inspiración, como muy a menudo se considera, es resultado del esfuerzo en la
elaboración de conclusiones novedosas por parte de la conciencia de cada individuo humano, que vence
sobre el Ego del trasfondo oscuro de la mente interior de cada individuo humano, en determinados
momentos de la vida cotidiana, siendo la prueba de ello, los reiterados malos momentos en los que se ve
todo negro, y que sin embargo la conciencia de cada individuo con el esfuerzo de su voluntad, es capaz
de sacarlos adelante, permitiendo a su vez la creatividad, por parte de cada individuo.
Sin embargo, dentro del Ego que construye y pone en marcha la ley de la vida cotidiana, toda
creación que se considera útil, surge de la necesidad de la conciencia de cada individuo humano,
contaminada por el Ego del trasfondo oscuro de la mente interior de cada individuo humano, de sacar
aparentemente claras y eficaces conclusiones, donde las otras conciencias, no ven nada más que lo de
siempre, es decir, una idea de creación súbita y aparentemente espontánea.
Por todo esto, la creatividad que se considera útil, y que surge de la necesidad de la conciencia de
cada individuo humano, que se encuentra contaminada por el Ego del trasfondo oscuro de la mente
interior de cada individuo humano, de sacar aparentemente claras y eficaces conclusiones, donde las
otras conciencias no ven nada más que lo de siempre, es decir, lo que ellos consideran su realidad de dar
siempre la misma respuesta, sin plantear ninguna novedad, que resuelva los problemas estructurales que
tiene la realidad humana y social en su conjunto, lo que por otra parte interrumpe y dificulta la reflexión
tanto consciente como inconsciente, de la repentina visión de una solución genial a cualquier problema
de la realidad, y por tanto, a su verificación con la exactitud de la intuición que da la conciencia de cada
individuo humano, que sería la solución.
De este modo, la verdadera ciencia, sería la que plantea respuestas novedosas pero a la vez
eficaces, a los problemas estructurales que tiene la realidad humana y social en su conjunto, mediante la
aceptación de una red social de nuevas teorías científicas, que parten de la intuición de la conciencia de
cada individuo humano, en los momentos en que esta conciencia, es capaz de vencer al Ego del
trasfondo oscuro de la mente interior de cada individuo humano.
Además, por otra parte, esta nueva red social de teorías científicas, que parten del continuo estudio
científico de la conciencia evolutiva, y que aprovechan la intuición de la conciencia de cada individuo
humano, en los momentos en que esta conciencia, es capaz de vencer al Ego del trasfondo oscuro de la
mente interior de cada individuo humano, van a permitir el desarrollo de una continua visión crítica de la
realidad, lo que redundará en un avance de la ciencia, y que favorece de esta manera el pluralismo
metodológico, y que no excluye por lo tanto, los llamados procedimientos irracionales del Ego del
trasfondo oscuro de la mente interior de cada individuo humano, ya que es lo que quiere que ocurra, la
ciencia oficial.
Por todo esto, la teoría del reconocimiento científico de inicios del tercer milenio, señala que la
ciencia entendida como metodología del positivismo científico, es una forma más de pensamiento, que
ha desarrollado el individuo humano, y que precisamente no tiene porque ser la mejor.
Además, paradójicamente, esta ciencia entendida como metodología del positivismo científico, es
una forma más de pensamiento, que sin embargo además de no ser creativo, se acepta sin ninguna
crítica, ya que se acaban por tener que asimilar unas ideas, las cuales acaban siendo los intereses de un
pequeño grupo, ya que les legitima en la división individual y social de las ideas, que unos tienen que
creer porque si, siempre que se quieran adaptar al Ego que construye y pone en marcha la ley de la vida
cotidiana, mientras que esos pocos individuos humanos, que manejan estas ideas manipuladas por su
Ego del trasfondo oscuro de la mente interior, vencen de una manera implacable, sobre la claridad de la
luz de la conciencia de esos individuos humanos, que no les queda más remedio que creer, esas ideas
que le mandan creer.
De este modo, la mayor parte de los individuos humanos, siempre que quieran adaptar su Ego del
trasfondo oscuro de la mente interior, al Ego que construye y pone en marcha la ley de la vida cotidiana,
tienen que saber que tienen que renunciar a la claridad de la luz de la conciencia, siendo en esta
renuncia, cuando se da el proceso por el que el Ego de los requerimientos de lo que el mundo quiere de
mi, socializa a cada individuo humano.
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