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investigador de la ciencia oficial, de un recuerdo en forma de creencia que tiene arraigado en su Ego del
trasfondo oscuro de la mente interior.
Es decir, dicha conclusión supuestamente científica, la saca de los prejuicios que tiene su Ego del
trasfondo oscuro de la mente interior, que por inercia egoica, que es la madre de las costumbres y
tradiciones con la que tiene que convivir cada individuo humano, ya que si quiere adaptarse al Ego de
los requerimientos de lo que el mundo quiere de mi, que es quien le impide a cada niño varón ver como
algo normal el jugar sexualmente con el sexo contrario, es decir, con el sexo femenino, por los prejuicios
que impone esos pocos individuos humanos que controlan a través de su Ego del trasfondo oscuro, la
conducta de esos niños que por su mayor debilidad egoica, no son capaces de imponerse al Ego social de
esos pocos individuos humanos, que construye y ponen en marcha la ley de la vida cotidiana, es decir,
lo que ellos consideran que debe ser el modelo sexual a seguir por la generalidad de los individuos
humanos.
Por todo esto, se puede decir, que todo va más allá, y es algo más profundo de las condicionantes
biológicas hormonas homosexuales, que se dan en la adolescencia, y que tanto predica la ciencia oficial,
como causa de que de repente, los niños varones, que hasta hace un tiempo jugaban todos juntos, ahora
se interesen por las niñas, ya que además esa atracción sexual por el mismo género sexual, no se acaba
nunca, ya que el Ego del trasfondo oscuro de la mente interior de cada individuo humano, tiene tanta
fuerza y es tan determinante en la vida cotidiana de cada individuo humano, porque siempre acaba
venciendo sobre la claridad de la luz de la conciencia, la cual si admite que lo semejante siempre atrae lo
semejante, aunque los prejuicios de esos pocos individuos humanos, que controlan a través de su Ego
del trasfondo oscuro, el Ego de los requerimientos de lo que el mundo quiere de mi, nunca lo quiera
admitir, y de ahí viene la estigmatización de los homosexuales por el conjunto de individuos humanos
que forman la sociedad.
De hecho, lo que quiere el Ego del trasfondo oscuro de la mente interior de esos pocos individuos
humanos, que controlan el Ego que construye y pone en marcha la ley de la vida cotidiana, y cuyo
control es permitido por el Ego del trasfondo oscuro de los demás individuos humanos, ya que es muy
cómodo dejarse llevar por la inercia egoica, es que los individuos humanos, vivan lo más inconscientes
posibles, a todo lo que son y hacen, ya que el objetivo es servirse de esa gran mayoría de individuos
humanos, que se dejan llevar por la inercia de su Ego del trasfondo oscuro, ya que todo lo que
aparentemente parece que fue debido al azar para la sociedad, para la claridad de la luz de la conciencia
de cada individuo humano, que aparece en los fugaces momentos en que es capaz de vencer al Ego del
trasfondo oscuro de la mente interior, tiene detrás de si una explicación.
De esta manera, para la ciencia oficial, cuando el individuo humano llega al mundo, con el único
conocimiento que conecta cada individuo humano, es con el genético, es decir, con el heredado de
nuestros predecesores, ya que nuestros predecesores tuvieron que aprender donde estaban los peligros
para su supervivencia.
Para estos científicos oficiales de inicios del tercer milenio, este combate por la supervivencia de la
especie humana, dota a cada individuo humano de un conocimiento genético que le es dado
inconscientemente, y parte de ese conocimiento es el emocional, aunque hasta ahora, a inicios del tercer
milenio, la sociedad a través de sus diferentes instancias de socialización como la familia, la escuela, los
grupos de pares, o los medios de comunicación social, hayan querido excluir dicho conocimiento
emocional.
De hecho, estos científicos del positivismo oficial, de inicios del tercer milenio, sólo hablan de la
felicidad, en términos cuantitativos, es decir, como gestionar el volumen de emociones que tiene cada
individuo humano, ya que son incapaces de investigar y por tanto aclarar en que consiste este mundo
interior de los individuos humanos, confundiendo todo, es decir, tratando de despistar a la gran mayoría
de individuos humanos.
Por tanto, estos científicos del positivismo oficial, ven la felicidad, como el análisis cuantitativo de
su coste social, es decir, económico, ya que esta felicidad la unen siempre a una serie de magnitudes
como puede ser la prolongación de los años de vida de aquellos individuos humanos que viven en los
países donde las condiciones materiales de vida son superiores, y por ello señalan que este uno de los
grandes temas de investigación del futuro de las ciencias sociales, ya que incluso algunos de estos
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